¿Cómo se brilla el metal?

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Para recuperar el brillo de metales opacos, frota limón con sal. Si la opacidad es profunda, sumerge el objeto en una solución de agua caliente, bicarbonato de sodio y jabón. Esta solución eficaz restaura el brillo a cualquier objeto metálico.
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Restaura el brillo de tus metales opacos: una guía paso a paso

Los metales suelen perder su brillo con el tiempo debido a la oxidación y el deslustre. Sin embargo, recuperar su resplandor es más fácil de lo que piensas. Aquí tienes dos métodos eficaces para restaurar el brillo de tus objetos metálicos apagados:

Método 1: Limpieza con limón y sal

Materiales:

  • Limón
  • Sal

Instrucciones:

  1. Corta un limón por la mitad.
  2. Espolvorea sal sobre la superficie cortada.
  3. Frota el limón salado sobre el metal opaco.
  4. Enjuaga el objeto con agua tibia y sécalo con un paño limpio.

El ácido cítrico del limón y las propiedades abrasivas de la sal actúan como un limpiador natural que elimina la oxidación y las manchas superficiales.

Método 2: Sumersión en solución de bicarbonato de sodio

Materiales:

  • Bicarbonato de sodio
  • Jabón para platos
  • Agua caliente
  • Recipiente

Instrucciones:

  1. En un recipiente, mezcla agua caliente con 1/4 taza de bicarbonato de sodio y unas gotas de jabón para platos.
  2. Sumerge el objeto metálico opaco en la solución.
  3. Déjalo en remojo durante varias horas o toda la noche.
  4. Retira el objeto de la solución y enjuágalo bien con agua tibia.
  5. Seca el objeto con un paño limpio.

El bicarbonato de sodio neutraliza los ácidos que causan la oxidación. El jabón ayuda a disolver la suciedad y los aceites. Esta solución funciona bien para eliminar el deslustre y restaurar el brillo de los objetos metálicos muy opacos.

Consejos adicionales:

  • Siempre prueba estos métodos en un área pequeña e imperceptible antes de aplicarlos a toda la superficie.
  • No utilices lana de acero u otros limpiadores abrasivos que puedan rayar el metal.
  • Aplica una capa de cera o aceite después de la limpieza para proteger el metal del deslustre futuro.