¿Cómo te queda la piel después de quitarte un lunar?

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Tras la eliminación del lunar con Plasmage, se crea una costra protectora que se desprende naturalmente entre 10 y 14 días. Para una óptima cicatrización, mantén la zona hidratada con una crema específica durante este período.
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El cuidado de la piel después de la eliminación de un lunar con Plasmage

La eliminación de un lunar mediante la tecnología Plasmage es un procedimiento mínimamente invasivo que implica la vaporización del lunar mediante un dispositivo de plasma. Después del tratamiento, es esencial seguir las instrucciones de cuidado posterior para garantizar una cicatrización óptima y minimizar el riesgo de complicaciones.

Formación de costras y desprendimiento

Inmediatamente después del procedimiento, se formará una costra protectora sobre el área tratada. Esta costra es esencial para proteger la herida subyacente durante el proceso de curación. La costra generalmente se desprende de forma natural dentro de los 10 a 14 días.

Cuidado de la costra

Durante este período, es crucial mantener la zona hidratada con una crema específica recomendada por tu médico. Esto ayudará a suavizar la costra y promover la curación. Evita tocar o retirar la costra prematuramente, ya que esto puede provocar infecciones o cicatrices.

Cicatrización

Una vez que la costra se desprende, la piel subyacente comenzará a cicatrizar. La cicatrización suele tardar varias semanas y puede pasar por diferentes etapas de coloración, desde el rosa al rojo oscuro. Con el tiempo, la cicatriz se aclarará gradualmente y se volverá menos visible.

Recomendaciones adicionales

  • Mantén la zona tratada limpia y seca.
  • Evita la exposición prolongada al sol.
  • Sigue las instrucciones de tu médico sobre cualquier cuidado especial o restricciones.
  • Si experimentas algún enrojecimiento, hinchazón o dolor inusual, consulta a tu médico.

Conclusión

Siguiendo estas pautas de cuidado posterior, puedes ayudar a que la piel sane adecuadamente después de la eliminación de un lunar con Plasmage. Mantener la zona hidratada, evitar la manipulación y seguir las instrucciones de tu médico promoverá una cicatrización óptima y reducirá el riesgo de complicaciones.