¿Qué pasa si no te duchas después de ir a la playa?

Un chapuzón en el mar… y luego, la ducha: ¿Por qué no puedes saltártela?

El sol radiante, la brisa marina y la arena bajo los pies… ¡Un día en la playa es un bálsamo para el alma! Pero cuidado, la diversión no termina en la orilla. Si no te duchas después de un día en la playa, podrías estar invitando a problemas en tu piel.

Es cierto que la sensación de la sal y la arena puede persistir un rato, pero lo que no se ve a simple vista es la “fiesta” que se organiza en tu piel. La arena, la sal y el agua salada no son solo residuos inocuos, son un caldo de cultivo perfecto para bacterias y hongos.

¿Qué puede pasar si no te duchas?

• Pie de atleta: La humedad y la arena en tus pies, combinadas con la sal, son un paraíso para el hongo que causa esta molesta infección.
• Erupciones cutáneas: La sal irrita la piel, especialmente si ya es sensible, y facilita la aparición de reacciones alérgicas y rojeces.
• Infecciones: Las bacterias que se quedan en la piel tras el baño pueden provocar acné, foliculitis y otras infecciones.

Una ducha rápida y fresca es la mejor solución:

• Elimina la sal, la arena y las bacterias de tu cuerpo.
• Previene la irritación y las infecciones.
• Deja tu piel fresca y limpia.

No es necesario un baño de larga duración, solo unos minutos de agua y jabón bastan para disfrutar de un día en la playa sin preocupaciones. ¡Así que, no te olvides de la ducha después de un día de sol y mar!