¿Cuál es la distancia entre la Tierra y la Luna?

La Danza Cósmica: ¿A qué distancia se encuentra realmente la Luna de la Tierra?

Desde la antigüedad, la Luna ha fascinado a la humanidad. Un faro nocturno, una musa para poetas, un objeto de estudio para científicos. Pero, ¿alguna vez te has preguntado a qué distancia se encuentra este cuerpo celeste de nuestro planeta? La respuesta, aunque aparentemente sencilla, revela una fascinante danza cósmica.

Si bien la cifra que suele citarse como respuesta a la pregunta sobre la distancia entre la Tierra y la Luna es aproximadamente 384.400 kilómetros, esta es en realidad una distancia promedio. La realidad es mucho más dinámica.

La clave para entender esta fluctuación reside en la forma de la órbita lunar. Contrario a lo que muchos creen, la Luna no describe un círculo perfecto alrededor de la Tierra. En cambio, su trayectoria es elíptica. Esta forma ovalada implica que la distancia entre ambos cuerpos varía significativamente a lo largo del mes lunar.

En el punto más cercano de su órbita, conocido como perigeo, la Luna se encuentra a unos 363.104 kilómetros de distancia. En contraste, en el punto más lejano, el apogeo, esta distancia aumenta hasta alcanzar los 405.696 kilómetros.

Esta diferencia de más de 42.000 kilómetros no es trivial. Afecta sutilmente a las mareas terrestres y, aunque imperceptible a simple vista, también influye en el tamaño aparente de la Luna vista desde nuestro planeta. De hecho, cuando la Luna llena coincide con el perigeo, se produce el fenómeno conocido como “superluna”, donde el satélite natural se ve ligeramente más grande y brillante.

En resumen, la distancia entre la Tierra y la Luna no es un valor estático, sino una variable en constante cambio. La cifra de 384.400 kilómetros nos proporciona una referencia, pero la elíptica órbita lunar nos recuerda la dinámica y compleja relación que existe entre nuestro planeta y su fiel compañera celestial. La próxima vez que admires la Luna en el cielo nocturno, recuerda esta danza cósmica y la fluctuante distancia que nos separa de ella, un recordatorio constante de la belleza y el misterio del universo.