¿Qué controla la luz en la cámara?

El control de la luz en la fotografía: El papel de la apertura

En el mundo de la fotografía, el control de la luz es esencial para lograr imágenes impresionantes. Uno de los componentes clave que determina la cantidad de luz que entra en la cámara es la apertura del objetivo.

¿Qué es la apertura?

La apertura es un diafragma ajustable dentro del objetivo que regula el paso de luz a través de él. Se mide en números f-stop, como f/2.8, f/5.6 o f/11. Cuanto menor sea el número f-stop, mayor será la apertura y más luz entrará en la cámara. Por el contrario, cuanto mayor sea el número f-stop, más pequeña será la apertura y menos luz entrará.

Cómo funciona la apertura

Cuando se ajusta la apertura, las láminas del diafragma se abren o cierran para controlar la cantidad de luz que llega al sensor de la cámara. Una apertura más amplia (f-stop más bajo) permite que entre más luz, mientras que una apertura más estrecha (f-stop más alto) permite que entre menos luz.

Efectos de la apertura

La apertura no solo controla la cantidad de luz en la imagen, sino que también afecta a la profundidad de campo (DOF). La profundidad de campo es la distancia entre el punto más cercano y más lejano de la escena que aparece nítido. Una apertura más amplia (número f más bajo) produce una menor profundidad de campo, lo que desenfoca el fondo y enfatiza al sujeto. Una apertura más estrecha (número f más alto) produce una mayor profundidad de campo, manteniendo nítida una mayor parte de la escena.

Tipos de aperturas

Existen diferentes tipos de aperturas disponibles en los objetivos de las cámaras. Las aperturas comunes incluyen:

• Aperturas fijas: Estas aperturas no se pueden ajustar y, por lo general, se encuentran en objetivos de bajo coste.
• Aperturas variables: Estas aperturas se pueden ajustar en un rango de números f-stop, lo que proporciona flexibilidad en el control de la luz y la profundidad de campo.
• Aperturas iris: Estas aperturas utilizan láminas superpuestas para controlar el paso de luz, ofreciendo un control preciso sobre la profundidad de campo.

Conclusión

La apertura del objetivo es un componente crucial para controlar la cantidad de luz que llega al sensor de la cámara. Al comprender cómo funciona la apertura y cómo afecta a la profundidad de campo, los fotógrafos pueden manipular la luz para crear imágenes impactantes y creativas.