¿Qué es lo que hay dentro de la Luna?

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El interior lunar, según Nature (mayo 2023), consta de un núcleo metálico denso, similar al de la Tierra, rodeado de un manto parcialmente fundido.
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Descubriendo los misterios internos de la Luna

El interior de nuestro satélite natural, la Luna, ha sido objeto de intensa investigación durante décadas. Recientemente, un estudio exhaustivo publicado en la prestigiosa revista Nature (mayo de 2023) ha arrojado nueva luz sobre su composición y estructura, revelando detalles fascinantes.

Un corazón metálico: El núcleo

En el centro de la Luna reside un núcleo metálico denso, comparable al de la Tierra. Este núcleo, que se estima tiene un radio de aproximadamente 240 kilómetros, está compuesto principalmente de hierro y níquel. Se cree que este núcleo metálico se formó durante los primeros estadios de la historia de la Luna, cuando se diferenciaron los materiales pesados y ligeros debido a la gravedad.

Un manto parcialmente fundido

Rodeando el núcleo está un manto parcialmente fundido, que se extiende desde una profundidad de unos 1.000 kilómetros hasta la superficie. A diferencia del manto sólido de la Tierra, el manto lunar contiene una pequeña cantidad de roca fundida o parcialmente fundida, conocida como magma. Este magma se origina en el núcleo y asciende hacia la superficie a través de fisuras y fracturas.

El papel del calor

La presencia de un manto parcialmente fundido indica que la Luna todavía conserva una cierta cantidad de calor interno. Este calor es generado por la desintegración radiactiva de elementos como el uranio, el torio y el potasio, así como por los impactos de meteoritos. El calor interno ayuda a mantener el manto parcialmente fundido y es responsable de la actividad geológica y volcánica pasada de la Luna.

Implicaciones para la exploración

La comprensión del interior lunar es crucial para la exploración espacial. Conocer la composición y estructura de la Luna puede ayudar a los científicos y astronautas a identificar posibles recursos, como depósitos minerales o agua, que podrían ser utilizados para futuras misiones. Además, el estudio del interior lunar puede proporcionar información sobre la formación y evolución de la Luna, así como sobre el sistema Tierra-Luna en su conjunto.

Estudios futuros

El estudio publicado en Nature ha mejorado significativamente nuestra comprensión del interior lunar, pero quedan muchas preguntas por responder. Las futuras misiones espaciales, como la Artemis de la NASA, tienen como objetivo recopilar datos adicionales y muestras del interior lunar, profundizando nuestro conocimiento de este fascinante cuerpo celeste. Estos estudios continuos ayudarán a desentrañar aún más los misterios que oculta la Luna.