¿Cómo conseguir un sabor salado sin sal?

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Refuerza el sabor salado de tus platillos con vinagres —blanco, tinto, de arroz o balsámico— agregándolos al final de la cocción. El aceite de ajonjolí tostado, por su complejidad, también proporciona un intenso sabor umami que simula la salinidad.
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Cómo obtener un sabor salado sin sal

En la búsqueda de comidas sabrosas y saludables, a menudo nos vemos tentados a añadir una pizca de sal para realzar el sabor. Sin embargo, para aquellos que siguen una dieta baja en sodio o simplemente buscan reducir su consumo de sal, encontrar alternativas sabrosas puede ser un desafío. Aquí tienes dos métodos ingeniosos para conseguir un sabor salado sin necesidad de añadir sal:

1. Potencia el sabor con vinagres

Los vinagres, como el blanco, el tinto, el de arroz y el balsámico, no solo añaden acidez a los platos, sino que también pueden reforzar su sabor salado. Su acidez estimula los receptores de sabor en nuestra lengua, engañándonos para que percibamos un gusto salado. Para obtener los mejores resultados, añade vinagre al final de la cocción, ya que el calor puede evaporar los compuestos volátiles que aportan ese sabor salado.

2. Utiliza aceite de ajonjolí tostado

El aceite de ajonjolí tostado es un ingrediente culinario versátil que aporta un intenso sabor umami a los platos. El umami es el quinto sabor, además de los dulce, salado, agrio y amargo. Se describe como un sabor sabroso y carnoso, similar a la salinidad. El aceite de ajonjolí tostado es especialmente rico en glutamato, un aminoácido que contribuye al sabor umami. Al añadir unas gotas de este aceite al final de la cocción, puedes realzar el sabor de tus platos de forma natural, sin necesidad de añadir sal adicional.

Estas técnicas proporcionan formas efectivas de obtener un sabor salado sin comprometer la salud o el sabor. Experimenta con estos ingredientes para descubrir nuevas formas de realzar tus platos y disfrutar de comidas sabrosas sin depender de la sal excesiva.