¿Cómo puedo aliviar un corte de digestión?

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Para tratar un corte de digestión, retire a la persona del agua, séquela y abríguela con toallas. La prioridad es restablecer su temperatura corporal. Colocarla en posición horizontal con las piernas ligeramente elevadas facilitará la recuperación.

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El corte de digestión: un susto evitable. Cómo actuar ante esta emergencia.

El verano, sinónimo de baños refrescantes en piscinas, ríos y mares, puede verse empañado por un episodio desagradable: el corte de digestión. Aunque popularmente se le atribuye a la digestión en sí, la hidrocución, como se le conoce médicamente, es una reacción del cuerpo a un cambio brusco de temperatura. Este choque térmico puede provocar mareos, pérdida de conocimiento, vómitos e incluso paro cardiorrespiratorio. Por ello, es fundamental saber cómo reaccionar ante esta emergencia.

Contrario a la creencia popular, no se trata de esperar a que termine la digestión para bañarse. El factor clave es la aclimatación progresiva al agua. Entrar de golpe en agua fría, especialmente después de una exposición prolongada al sol, provoca una vasoconstricción periférica para mantener la temperatura corporal central. Esta redistribución sanguínea, unida a la apnea que a menudo acompaña la inmersión, puede disminuir el flujo sanguíneo al cerebro y provocar la pérdida de consciencia.

Si presencias un corte de digestión, actúa con rapidez y sigue estos pasos:

  1. Rescate y seguridad: Lo primero es sacar a la persona del agua con precaución, asegurándote de no ponerte en peligro.
  2. Calor corporal: Una vez fuera del agua, seca a la persona vigorosamente y cúbrela con toallas o mantas para evitar una mayor pérdida de calor. El objetivo primordial es restablecer la temperatura corporal normal. Evita frotar la piel con fuerza, ya que podría empeorar la situación.
  3. Posición horizontal con piernas elevadas: Coloca a la persona en posición horizontal, preferiblemente con las piernas ligeramente elevadas por encima del nivel del corazón. Esta postura favorece el retorno venoso y mejora la circulación cerebral.
  4. Control de la consciencia y respiración: Monitoriza continuamente el estado de la persona. Comprueba si responde a estímulos y si respira con normalidad.
  5. Alerta a los servicios de emergencia: Si la persona no recupera la consciencia o presenta dificultades respiratorias, llama inmediatamente a los servicios de emergencia (112 en España). Informa con claridad sobre la situación y sigue sus instrucciones.
  6. Evita remedios caseros: No intentes dar de beber o comer a la persona si está inconsciente. Evita también remedios caseros como dar palmadas o sacudirla, ya que podrían ser perjudiciales.
  7. Observación continua: Incluso después de que la persona recupere la consciencia, es importante mantenerla en observación durante un tiempo para detectar cualquier complicación.

La prevención es la mejor arma contra el corte de digestión. Entra al agua progresivamente, especialmente cuando está fría, y evita los cambios bruscos de temperatura. Hidrátate adecuadamente y evita las comidas copiosas antes del baño. Conocer estas sencillas medidas puede marcar la diferencia entre un susto y una tragedia.