¿Cómo quitar lo oxidado de un termo?

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Para eliminar la oxidación de un termo, mezcla bicarbonato de sodio con agua. Aplica la pasta resultante sobre la zona afectada, deja actuar unos minutos, limpia con un paño húmedo sin frotar y enjuaga. Seca completamente el acero.
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Cómo eliminar el óxido de un termo

El óxido es un problema común que puede afectar a los termos, especialmente si se utilizan para almacenar líquidos ácidos. Si tu termo está oxidado, no te preocupes. Aquí tienes una guía paso a paso para quitar el óxido de tu termo y dejarlo como nuevo:

Materiales que necesitarás:

  • Bicarbonato de sodio
  • Agua
  • Paño húmedo
  • Toalla de microfibra

Instrucciones:

  1. Crea una pasta: Mezcla una cucharada de bicarbonato de sodio con unas gotas de agua hasta formar una pasta.

  2. Aplica la pasta: Aplica la pasta sobre la zona oxidada del termo. Cubre completamente el óxido y deja actuar durante 15-20 minutos.

  3. Limpia suavemente: Utiliza un paño húmedo para limpiar la pasta y el óxido. Evita frotar con fuerza, ya que podría dañar el termo.

  4. Enjuaga: Enjuaga el termo con agua limpia para eliminar cualquier resto de bicarbonato de sodio u óxido.

  5. Seca completamente: Seca completamente el termo con una toalla de microfibra. Asegúrate de que no quede ninguna humedad, ya que podría provocar más oxidación.

Consejos adicionales:

  • Para las zonas de óxido más persistentes, puedes dejar actuar la pasta durante más tiempo, hasta varias horas.
  • Si el óxido es extenso, puedes repetir el proceso varias veces.
  • Una vez que hayas quitado el óxido, puedes aplicar una capa de aceite mineral o vaselina al termo para protegerlo de la oxidación futura.
  • Para evitar la oxidación, lava el termo regularmente con agua tibia y jabón y sécalo completamente después de cada uso.

Siguiendo estos pasos, puedes quitar eficazmente el óxido de tu termo y mantenerlo en buenas condiciones durante años.