¿Qué es bueno para desinflamar la mucosa gástrica?

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Para reducir la inflamación de la mucosa gástrica, se utilizan antibióticos si existe infección por Helicobacter pylori. Adicionalmente, se emplean fármacos que disminuyen o neutralizan la producción de ácido estomacal para facilitar la recuperación del tejido. El médico deberá determinar el tratamiento adecuado según la causa y gravedad de la inflamación.

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Tratamiento de la inflamación de la mucosa gástrica

La mucosa gástrica es el revestimiento protector del estómago. Cuando esta mucosa se inflama, puede provocar una serie de síntomas desagradables, como dolor abdominal, náuseas, vómitos e hinchazón. Existen varias opciones de tratamiento disponibles para reducir la inflamación de la mucosa gástrica y aliviar los síntomas asociados.

Tratamiento farmacológico

  • Antibióticos: Si la causa de la inflamación es una infección por la bacteria Helicobacter pylori, se recetarán antibióticos para erradicarla.
  • Inhibidores de la bomba de protones (IBP): Los IBP reducen la producción de ácido estomacal, lo que permite que la mucosa gástrica se recupere.
  • Antagonistas del receptor H2: Estos medicamentos también reducen la producción de ácido estomacal, pero son menos potentes que los IBP.
  • Antiácidos: Los antiácidos neutralizan el ácido estomacal, proporcionando un alivio temporal de los síntomas.

Tratamiento no farmacológico

  • Evitar los factores desencadenantes: Identificar y evitar los factores que desencadenan la inflamación, como ciertos alimentos, bebidas o medicamentos, puede ayudar a reducir los síntomas.
  • Dieta blanda: Consumir una dieta blanda puede ayudar a reducir la irritación de la mucosa gástrica.
  • Comer comidas pequeñas frecuentes: Comer comidas pequeñas y frecuentes puede ayudar a reducir la producción de ácido estomacal.
  • Dormir con la cabecera elevada: Elevar la cabecera de la cama puede ayudar a reducir el reflujo ácido, que puede agravar la inflamación.

Cuándo consultar a un médico

Es importante consultar a un médico si se experimentan síntomas de inflamación de la mucosa gástrica. Un médico puede diagnosticar la causa de la inflamación y recomendar el tratamiento adecuado. El tratamiento temprano puede ayudar a prevenir complicaciones más graves, como úlceras o cáncer de estómago.