¿Qué hace el bicarbonato de sodio en una llaga?

El poder curativo del bicarbonato de sodio en las llagas bucales

Las llagas bucales, también conocidas como aftas, son pequeñas úlceras dolorosas que pueden aparecer en la boca, lengua, mejillas o encías. Estas molestas lesiones suelen ser antiestéticas y pueden dificultar el habla, la alimentación y la bebida. Afortunadamente, existe un remedio casero asequible y eficaz que puede ayudar a aliviar las molestias y acelerar la curación: el bicarbonato de sodio.

Neutralización de la acidez

Las llagas bucales suelen estar rodeadas de un ambiente ácido, que agrava la inflamación y el dolor. El bicarbonato de sodio, con su naturaleza alcalina, neutraliza esta acidez al crear un pH más neutro en la boca. Esto reduce el enrojecimiento, la hinchazón y la sensación de ardor asociada a las llagas.

Alivio del dolor

El efecto neutralizador del bicarbonato de sodio también alivia el dolor. Al reducir la acidez, disminuye la inflamación y el malestar que causan las llagas bucales. Además, su acción antiséptica ayuda a eliminar las bacterias que pueden exacerbar el dolor.

Reducción de la inflamación

El bicarbonato de sodio tiene propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a reducir la hinchazón y el enrojecimiento de las llagas bucales. Al calmar la inflamación, facilita la curación y acelera el proceso de cicatrización.

Lucha contra las bacterias

Las llagas bucales suelen estar causadas por bacterias que se acumulan en la boca. El bicarbonato de sodio tiene propiedades antisépticas que ayudan a combatir estas bacterias, lo que reduce el riesgo de infección y acelera la curación.

Cómo utilizar el bicarbonato de sodio para las llagas bucales

Para utilizar el bicarbonato de sodio como tratamiento para las llagas bucales, existen varios métodos:

• Enjuague bucal: Mezcle media cucharadita de bicarbonato de sodio en un vaso de agua tibia. Haga gárgaras con la solución durante 30 segundos, 2-3 veces al día.
• Pasta: Mezcle una cucharada de bicarbonato de sodio con unas gotas de agua para formar una pasta espesa. Aplique la pasta directamente sobre la llaga bucal y déjela actuar durante unos minutos antes de enjuagarse.
• Polvo: Espolvoree una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio directamente sobre la llaga bucal. Deje actuar durante unos minutos y luego enjuague.

Nota: El bicarbonato de sodio puede tener un sabor salado desagradable. Para mitigarlo, puede añadir unas gotas de miel o extracto de menta a la solución de enjuague.

Conclusión

El bicarbonato de sodio es un remedio casero eficaz y asequible para tratar las llagas bucales. Su acción neutralizadora, antiséptica y antiinflamatoria ayuda a reducir el dolor, la inflamación y el tiempo de curación. Al incorporar este simple tratamiento a su rutina, puede aliviar las molestias de las llagas bucales y promover una cicatrización más rápida.