¿Qué no se debe hacer cuando se está en la mesa?

Desterrando los Malos Hábitos: Una Guía para Brillar en la Mesa

La mesa es un espacio social, un lugar donde compartimos alimentos, conversaciones y, en definitiva, construimos relaciones. Ya sea en una comida familiar informal o en un evento formal, el comportamiento que mostramos a la mesa refleja nuestra educación y respeto hacia los demás. Por eso, es fundamental evitar ciertos errores comunes que pueden empañar la experiencia para todos.

Olvídate de lo que hayas visto en series o películas, aquí te presentamos una guía concisa sobre lo que NO debes hacer cuando te encuentras a la mesa:

Evita estos errores comunes, que pueden parecer insignificantes, pero marcan la diferencia entre una experiencia agradable y una que preferirías olvidar:

• Hablar con la boca llena: Este es, sin duda, uno de los peores errores. Es desagradable para los demás y puede resultar en accidentes como atragantamientos o que la comida salga disparada. Espera a tragar y a limpiar tu boca antes de iniciar una conversación. La cortesía es la clave.

• Sacudir los cubiertos: Ya sea nerviosismo, aburrimiento o simplemente un tic, sacudir o golpear los cubiertos contra el plato es un hábito irritante para el resto de los comensales. Intenta mantener tus manos relajadas y evita cualquier ruido innecesario. Un cubierto silencioso es un cubierto cortés.

• Utilizar el teléfono móvil: En la era digital, esta es una de las faltas más comunes. El teléfono móvil es una distracción y una señal de falta de atención e interés en las personas que te acompañan. Guárdalo, siléncialo y dedícale tiempo de calidad a la conversación y a disfrutar de la comida. Recuerda: la mesa es para conectar con personas, no con pantallas.

• Colocar los codos sobre la mesa: Aunque existen diferentes escuelas de pensamiento sobre este punto, generalmente, colocar los codos sobre la mesa durante la comida se considera de mala educación. Puedes apoyarlos entre platos, pero evítalo mientras estás comiendo. Mantén una postura erguida y elegante.

• Comer con las manos (sin justificación): A menos que la comida esté específicamente diseñada para comerse con las manos (como alitas de pollo o ciertos tipos de aperitivos), utiliza los cubiertos apropiados. De lo contrario, podrías dar la impresión de falta de higiene y formalidad. Si tienes dudas, observa a los demás o pregunta discretamente.

En resumen:

Una buena etiqueta en la mesa no se trata solo de seguir reglas arbitrarias, sino de mostrar respeto por los demás y crear un ambiente agradable para todos. Al evitar estos errores comunes, estarás demostrando tu consideración y contribuyendo a una experiencia culinaria más placentera para ti y para quienes te rodean. La clave es la atención, la cortesía y la sensibilidad hacia los demás. ¡Buen provecho!