¿Qué tanto engorda el mote?

El Mote: Alimento energético, ¿pero engorda? Desmitificando el mito.

El mote, ese grano ancestral andino de sabor suave y textura versátil, se ha convertido en un ingrediente clave en diversas gastronomías. Pero una pregunta persiste entre quienes buscan cuidar su peso: ¿cuánto engorda el mote? La respuesta, como suele ocurrir con la alimentación, no es tan simple como un sí o un no.

Con aproximadamente 113 calorías por cada 100 gramos, el mote no se sitúa entre los alimentos más calóricos. Sin embargo, su contenido en carbohidratos, específicamente 25 gramos de carbohidratos complejos por cada 100 gramos, es un factor clave a considerar. La clave reside en la naturaleza de estos carbohidratos. Al ser complejos, se digieren más lentamente que los azúcares simples, proporcionando una liberación gradual de energía y evitando picos bruscos de glucosa en sangre. Esto se traduce en una mayor sensación de saciedad, lo que puede ser beneficioso para el control del peso.

La presencia de fibra en el mote refuerza este efecto saciante. La fibra, además de regular el tránsito intestinal, ayuda a controlar el apetito y a prevenir atracones. Por lo tanto, aunque el mote aporta calorías, su capacidad para mantenernos llenos por más tiempo puede contribuir a un consumo calórico total menor a lo largo del día.

Es importante destacar que el mote, al igual que cualquier otro alimento, puede contribuir al aumento de peso si se consume en exceso. La clave está en la moderación y la inclusión dentro de una dieta equilibrada. Un plato de mote acompañado de proteínas magras (como pollo o pescado) y verduras, por ejemplo, constituye una opción nutricionalmente completa y satisfactoria, sin ser necesariamente engordante.

Otro punto a favor del mote es su ausencia de gluten, lo que lo convierte en una alternativa segura para personas con celiaquía o intolerancia al gluten. Esto amplía considerablemente su valor nutricional y su versatilidad en la dieta.

En conclusión, el mote no es un alimento engordante per se. Su contenido calórico moderado, su riqueza en carbohidratos complejos y fibra, y su efecto saciante, lo convierten en un ingrediente valioso en una dieta balanceada. El aumento de peso dependerá, en última instancia, de la cantidad consumida y del contexto de la dieta completa. Incluirlo con moderación como parte de una alimentación saludable y activa, puede ser un gran aporte a una dieta equilibrada y nutritiva.