¿Qué engorda más, el azúcar o la sal?

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El azúcar, con 400 calorías por cada 100 gramos, engorda considerablemente más que la sal, la cual no aporta calorías como condimento.
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¿Azúcar o sal: cuál engorda más?

Cuando se trata de mantener un peso saludable, es crucial comprender el papel que desempeñan los alimentos en nuestro cuerpo. Dos ingredientes comunes en nuestra dieta son el azúcar y la sal, pero ¿cuál de ellos contribuye más al aumento de peso?

Calorías en el azúcar frente a la sal

La principal diferencia entre el azúcar y la sal en relación con el aumento de peso es su contenido calórico. El azúcar, un carbohidrato simple, contiene aproximadamente 400 calorías por cada 100 gramos. Por el contrario, la sal, un mineral, no aporta calorías como condimento. Esto significa que, gramo por gramo, el azúcar engorda considerablemente más que la sal.

El azúcar como fuente de energía

El cuerpo utiliza el azúcar para obtener energía. Cuando consumimos azúcar, se descompone rápidamente en glucosa, que luego es transportada por la sangre a las células. Si no se utiliza inmediatamente para obtener energía, el exceso de glucosa se almacena como grasa.

El papel de la insulina

Cuando los niveles de glucosa en sangre aumentan, el cuerpo libera la hormona insulina, que ayuda a las células a absorber la glucosa. Sin embargo, niveles constantemente altos de insulina pueden provocar resistencia a la insulina, lo que dificulta que las células absorban la glucosa y contribuye al aumento de peso.

La sal y la retención de agua

Si bien la sal no contiene calorías, puede contribuir a la retención de agua. Cuando consumimos demasiada sal, el cuerpo retiene más líquido, lo que puede provocar hinchazón y aumento de peso temporal. Sin embargo, este aumento de peso no se debe a un aumento de grasa corporal.

Conclusión

En términos de aumento de peso, el azúcar es claramente el culpable más importante. Su alto contenido calórico y su capacidad para promover la resistencia a la insulina contribuyen significativamente al aumento de peso. Por otro lado, la sal no aporta calorías y su papel en la retención de agua es temporal.

Por lo tanto, si está tratando de controlar su peso, es crucial limitar el consumo de azúcar y centrarse en alternativas más saludables como frutas, verduras y granos integrales. La sal, utilizada con moderación, es poco probable que contribuya significativamente al aumento de peso.