¿Qué hace un trofólogo?

El Mito del Trofólogo: Descifrando la Pseudociencia de la Combinación de Alimentos

En los últimos años, ha ganado popularidad la figura del “trofólogo”, un supuesto experto en la “trofología”, una disciplina que se presenta como la ciencia de la combinación de alimentos. Prometen una salud óptima a través de la ingesta de alimentos específicos en un orden determinado y evitando ciertas combinaciones. Pero, ¿qué hay de cierto en estas afirmaciones? ¿Qué hace realmente un trofólogo y por qué la trofología se considera una pseudociencia?

Un trofólogo, según la doctrina de la trofología, analiza las propiedades de los alimentos y su supuesta interacción dentro del sistema digestivo. Argumentan que combinaciones incorrectas pueden generar fermentaciones, putrefacciones y una serie de problemas digestivos, que a la larga conducen a enfermedades. Ofrecen asesoramiento personalizado sobre qué alimentos consumir, en qué orden y qué combinaciones evitar, basándose en principios como la separación de proteínas y carbohidratos, la acidez y la alcalinidad de los alimentos, y la “energía vital” que supuestamente poseen. Incluso llegan a atribuir a la trofología la capacidad de curar enfermedades crónicas.

Sin embargo, estas afirmaciones carecen de fundamento científico. La trofología no se basa en estudios rigurosos ni en evidencias científicas sólidas. La digestión humana es un proceso complejo y eficiente, capaz de procesar una amplia variedad de nutrientes simultáneamente. El estómago produce enzimas y ácidos que descomponen los alimentos, independientemente del orden en que se consuman. Si bien es cierto que algunos alimentos pueden ser más difíciles de digerir que otros para ciertas personas, esto se debe a intolerancias o alergias específicas, no a la combinación de alimentos en sí misma.

La comunidad científica no reconoce la trofología como una disciplina válida. No existen estudios revisados por pares que respalden sus afirmaciones. De hecho, muchas de las premisas de la trofología contradicen directamente el conocimiento científico establecido sobre la nutrición y la digestión.

Por tanto, es importante ser cautelosos ante las promesas de la trofología y los consejos de los autodenominados trofólogos. Si bien una alimentación equilibrada y variada es fundamental para la salud, las restricciones extremas y las combinaciones específicas promovidas por la trofología no tienen base científica y pueden incluso ser perjudiciales, al limitar la ingesta de nutrientes esenciales o generar trastornos alimentarios. En lugar de buscar soluciones mágicas, es recomendable consultar a profesionales de la salud cualificados, como nutricionistas y dietistas, para recibir asesoramiento basado en la evidencia científica. Ellos pueden proporcionar guías personalizadas y seguras para alcanzar una alimentación saludable y equilibrada.