¿Qué hacer si tengo un virus en el estómago?

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Para combatir la gastroenteritis viral, es crucial reponer líquidos y electrolitos. Ingiere abundantes líquidos, y si los vómitos persisten, bebe sorbos pequeños de líquidos transparentes como agua o soluciones de rehidratación oral.
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La Gastroenteritis Viral: Combatir el “Virus del Estómago” con Estrategias Eficaces

La molesta sensación de náuseas, vómitos y diarrea, a menudo acompañada de calambres abdominales y fiebre, es la desagradable realidad de la gastroenteritis viral, comúnmente conocida como “virus del estómago”. Aunque la mayoría de los casos son autolimitados y se resuelven en unos pocos días, saber cómo actuar es crucial para evitar complicaciones. Este artículo te guiará en el manejo de esta afección, enfocándose en estrategias clave que te ayudarán a recuperarte rápidamente.

El Peligro de la Deshidratación: Prioridad Número Uno

El principal riesgo de la gastroenteritis viral no es el virus en sí, sino la deshidratación. La pérdida de líquidos y electrolitos a través de los vómitos y la diarrea puede debilitarte significativamente, especialmente en niños y ancianos. Por lo tanto, la reposición de líquidos y electrolitos es la piedra angular del tratamiento.

¿Qué hacer? Una Guía Paso a Paso:

  1. Hidratación Constante: La clave es beber líquidos con frecuencia, incluso en pequeñas cantidades si los vómitos son persistentes. Olvídate de grandes tragos; sorbos pequeños y frecuentes son más efectivos. Las mejores opciones son:

    • Agua: La opción más sencilla y eficaz.
    • Soluciones de rehidratación oral (SRO): Disponibles en farmacias, estas soluciones contienen la proporción ideal de azúcar y sales para reponer electrolitos perdidos. Sigue las instrucciones del envase cuidadosamente.
    • Caldos claros: Caldos de pollo o verduras bajos en grasa pueden ayudar a reponer líquidos y electrolitos, pero evita aquellos con alto contenido de grasa, ya que podrían empeorar los síntomas.
    • Jugos diluidos: Jugo de manzana o de pera diluido con agua puede proporcionar electrolitos y azúcares, pero en cantidades moderadas. Evita los jugos con alto contenido de azúcar.
  2. Alimentos Blandos: Una vez que las náuseas y los vómitos hayan disminuido, puedes introducir gradualmente alimentos blandos de fácil digestión. Piensa en:

    • Arroz blanco: Fácil de digerir y aporta energía.
    • Plátanos: Ricos en potasio, un electrolito esencial.
    • Galletas saladas: Ayudan a retener líquidos y aportan sodio.
    • Papilla de manzana: Suave y fácil de digerir.
    • Pollo hervido desmenuzado: Fuente de proteína.
  3. Descanso: El reposo es fundamental para permitir que tu cuerpo se recupere. Evita actividades extenuantes.

  4. Monitorización: Presta atención a los síntomas. Si la diarrea o los vómitos son intensos o persisten por más de 24-48 horas, si hay fiebre alta o signos de deshidratación severa (boca seca, poca orina, mareos), consulta inmediatamente a un médico.

Lo que Debes Evitar:

  • Lácteos: Pueden empeorar la diarrea.
  • Comida grasosa o picante: Difíciles de digerir y pueden irritar el estómago.
  • Cafeína y alcohol: Pueden deshidratarte aún más.
  • Medicamentos antidiarreicos (sin consultar al médico): Pueden ser contraproducentes en algunos casos.

La gastroenteritis viral es un proceso autolimitado, pero la hidratación adecuada y el descanso son cruciales para una recuperación rápida y sin complicaciones. Si tienes dudas o tus síntomas empeoran, no dudes en consultar a un profesional de la salud. Recuerda que la información aquí proporcionada es de carácter informativo y no sustituye la atención médica profesional.