¿Qué plata no se pone negra?

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La plata de ley, o plata 925, no se oscurece con el tiempo gracias a su alta pureza.

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La verdad sobre la plata que no se ennegrece

La creencia popular dicta que existe una plata “que no se pone negra”. Si bien la publicidad a menudo refuerza esta idea, especialmente al hablar de “plata 925” o “plata de ley”, la realidad es un poco más compleja. Ninguna plata es completamente inmune al oscurecimiento. La plata de ley, con su 92.5% de pureza, es menos propensa a ennegrecerse que la plata de menor pureza, pero eventualmente también lo hará. La diferencia radica en la velocidad y la intensidad del proceso.

¿Por qué se oscurece la plata, incluso la de ley? La principal culpable es la reacción química con el sulfuro de hidrógeno (H₂S) presente en el aire. Este gas, producto de la descomposición de materia orgánica, reacciona con la plata formando sulfuro de plata, un compuesto de color oscuro. Factores como la humedad, el pH de la piel, la exposición a cosméticos e incluso la alimentación pueden influir en la rapidez de este proceso.

Entonces, ¿qué significa que una joya sea de “plata que no se ennegrece”? Generalmente, se refiere a que ha recibido un tratamiento superficial. Estos tratamientos pueden incluir:

  • Rodio: Un metal precioso del grupo del platino, el rodio se aplica mediante galvanoplastia, creando una capa protectora brillante y resistente a la corrosión. Esta capa, sin embargo, no es permanente y con el tiempo se desgasta, exponiendo la plata debajo al sulfuro de hidrógeno.
  • Plata con baño de paladio: Similar al rodio, el paladio ofrece una capa protectora, aunque suele ser menos común y más costosa.
  • Recubrimientos especiales: Algunas marcas utilizan recubrimientos nano-cerámicos u otros tratamientos patentados para aumentar la resistencia al oscurecimiento.

Es importante comprender que estos tratamientos retrasan la aparición del oscurecimiento, pero no lo eliminan por completo. Con el uso y el tiempo, la capa protectora se desgastará y la plata subyacente comenzará a reaccionar con el ambiente.

En conclusión, no existe una plata que sea eternamente inmune al oscurecimiento. La plata de ley, por su pureza, es más resistente, pero no invulnerable. Los tratamientos superficiales ofrecen una protección temporal, prolongando la vida útil del brillo original, pero eventualmente requieren un nuevo tratamiento para mantener su apariencia. La clave está en la información y en las expectativas realistas al adquirir una joya de plata. Con el cuidado adecuado y la comprensión de las propiedades del metal, se puede disfrutar de la belleza de la plata por mucho tiempo.