¿Qué significa zallar?

El término “zallar” evoca la imagen de marineros curtidos por el sol, maniobrando con pericia en la cubierta de un barco. Pero, ¿qué significa exactamente esta palabra, tan ligada al mundo náutico y tan poco frecuente en el lenguaje cotidiano?

Zallar describe la acción de desplazar un objeto pesado a lo largo de su eje longitudinal, guiándolo hacia la borda de la embarcación. No se trata de un simple arrastre, sino de un movimiento controlado, que implica rodar, deslizar o una combinación de ambos, generalmente con la ayuda de palancas, cabos o rodillos. Imaginemos, por ejemplo, un pesado barril de ron o un cofre repleto de mercancías que necesita ser trasladado desde la bodega hasta la borda para su descarga. Ese desplazamiento cuidadoso y preciso, ejecutado para evitar daños tanto a la carga como al barco, es lo que define la acción de zallar.

Es importante diferenciar zallar de otros verbos relacionados con el movimiento de objetos a bordo. Mientras que “izar” implica levantar una carga verticalmente, “arrastrar” sugiere un movimiento menos controlado y potencialmente más abrasivo, y “rodar” se limita a la rotación del objeto sobre sí mismo. Zallar, por su parte, combina el desplazamiento horizontal con el control y la precisión, buscando el equilibrio entre la eficiencia y la seguridad.

El término zallar, aunque de origen incierto, probablemente se relaciona con la idea de “salida” o “alejarse del centro”. Su uso se concentra principalmente en ámbitos marítimos y portuarios, formando parte del vocabulario técnico de marineros, estibadores y otros profesionales del sector. Si bien no es un término común en la conversación diaria, comprender su significado nos permite apreciar la riqueza y la especificidad del lenguaje náutico, un lenguaje forjado por la experiencia y la necesidad de comunicarse con precisión en un entorno desafiante.

Además de su aplicación a la carga, la acción de zallar también puede referirse al movimiento de elementos propios del barco, como mástiles o botes auxiliares, cuando estos son desplazados longitudinalmente sobre la cubierta para su ajuste, reparación o almacenamiento. En cualquier caso, la esencia de zallar reside en ese desplazamiento controlado a lo largo del eje del objeto, buscando su correcta colocación en el borde de la embarcación. Un término que, aunque poco conocido, nos acerca a la complejidad y la precisión del trabajo en el mar.