¿Cuál es la función social de la orientación?

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La orientación comunitaria impulsa la transformación social a través de acciones dirigidas y concertadas. Define un horizonte claro, guiando las decisiones y acciones colectivas para alcanzar objetivos compartidos y mejorar la realidad social de forma deliberada y eficiente.

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La Función Social de la Orientación

La orientación, en su acepción comunitaria, desempeña un papel fundamental en la transformación social. Esta función se materializa a través de acciones deliberadas y concertadas que impulsan el cambio positivo en las comunidades.

La orientación comunitaria establece un horizonte claro, guiando las decisiones y acciones colectivas hacia objetivos compartidos. Esta definición compartida de propósitos fomenta la colaboración y la cooperación entre los miembros de la comunidad, facilitando el logro de metas comunes.

Al orientar a la comunidad, se crea una visión compartida del futuro deseado, una aspiración colectiva que motiva a los individuos a trabajar juntos. Esta visión actúa como un faro, iluminando el camino hacia un futuro mejor y proporcionando un sentido de dirección y propósito.

Además, la orientación comunitaria promueve el empoderamiento de los individuos. Al proporcionar información, recursos y apoyo, la orientación equipa a los miembros de la comunidad con las herramientas y la confianza necesarias para participar activamente en la toma de decisiones que afectan sus vidas. Esta participación activa fomenta la autodeterminación y la capacidad de autogestión de la comunidad.

La función social de la orientación se extiende más allá de la planificación y el establecimiento de objetivos. También implica la evaluación continua del progreso, el ajuste de estrategias y la adaptación a las circunstancias cambiantes. Mediante este proceso dinámico, la orientación asegura que las acciones de la comunidad sigan siendo relevantes y efectivas en el logro de sus objetivos compartidos.

En resumen, la orientación comunitaria actúa como una fuerza transformadora, guiando a las comunidades hacia un futuro mejor. Define un horizonte claro, promueve la colaboración, empodera a los individuos, fomenta la participación activa y asegura la evaluación continua para un cambio social deliberado y eficiente.