¿Qué es la coordinación dinámica general?

La Coordinación Dinámica General: Un Pilar Fundamental en el Desarrollo Motor

La coordinación es una habilidad motriz esencial que nos permite realizar movimientos complejos y eficientes. Dentro del vasto universo de la coordinación, la coordinación dinámica general ocupa un lugar preponderante, ya que abarca la capacidad de integrar y armonizar el movimiento de todo el cuerpo en acciones que involucran el desplazamiento y la manipulación.

Esta forma de coordinación no se limita a la mera ejecución de un movimiento, sino que implica una intrincada interacción entre el sistema nervioso, el sistema muscular y el sistema esquelético. Requiere un control preciso del equilibrio, la fuerza, la velocidad y la precisión, todo ello orquestado en una secuencia temporal y espacial coherente.

El destacado pedagogo y psicomotricista Jean Le Boulch, considerado un pionero en el estudio del desarrollo motor, definía la coordinación dinámica general como la capacidad de realizar ejercicios que exigen una interacción ajustada y recíproca de todas las partes del cuerpo. Esta definición pone de manifiesto la importancia de la integración corporal para lograr una acción eficaz.

En la práctica, los ejercicios de coordinación dinámica general suelen implicar el desplazamiento o locomoción. Caminar, correr, saltar, nadar, bailar, escalar, lanzar y atrapar son solo algunos ejemplos de actividades que requieren un alto grado de coordinación dinámica general. En cada una de estas acciones, el cuerpo debe trabajar como un todo, ajustando constantemente su postura y movimiento para mantener el equilibrio y la dirección.

La sincronización integral del movimiento corporal es crucial para lograr una ejecución fluida y controlada. Imaginen un corredor; la coordinación entre sus brazos, piernas, tronco y cabeza debe ser perfecta para maximizar la eficiencia de su carrera y evitar lesiones. De la misma manera, un bailarín necesita una coordinación dinámica general impecable para realizar movimientos complejos con gracia y precisión.

La importancia de la coordinación dinámica general radica en su impacto en múltiples áreas del desarrollo. Una buena coordinación facilita el aprendizaje de nuevas habilidades motrices, mejora el rendimiento deportivo, promueve la autonomía en la vida diaria y contribuye al bienestar general. Un niño con una buena coordinación dinámica general será más hábil para jugar, practicar deportes y realizar tareas cotidianas como vestirse o atarse los zapatos.

En resumen, la coordinación dinámica general es mucho más que una simple habilidad física. Es la capacidad de orquestar el movimiento de todo el cuerpo para lograr un objetivo, y su desarrollo es fundamental para un funcionamiento óptimo en todos los ámbitos de la vida. Le Boulch nos recuerda que se trata de una danza precisa entre todas las partes del cuerpo, un diálogo constante que nos permite interactuar con el mundo de manera eficiente y armoniosa.