¿Qué se pone en la formación académica?
Más Allá de las Fechas y los Títulos: Cómo Dar Vida a tu Formación Académica en el Currículum
La sección de formación académica en un currículum vitae a menudo se percibe como una simple lista de datos: fechas, títulos y nombres de instituciones. Sin embargo, esta área crucial puede ser mucho más que eso. Es tu oportunidad de mostrar no solo qué has estudiado, sino también cómo tus estudios te han preparado para el puesto al que aspiras y qué te diferencia del resto de los candidatos.
Para maximizar el impacto de esta sección, ve más allá de lo básico. En lugar de una simple enumeración, presenta tu formación de forma estratégica, priorizando la información más relevante y significativa para el puesto al que te presentas.
¿Qué incluir (y cómo destacarlo)?
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Prioriza lo relevante: Si aspiras a un puesto en ingeniería de software, un curso de verano en marketing digital, aunque sea interesante, probablemente sea menos relevante que tu máster en Ingeniería Informática. Ordena tus estudios de forma cronológica inversa, comenzando por el más reciente y significativo para el empleo deseado.
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Más que fechas y títulos: Aunque la información básica (nombre del título, nombre de la universidad, ciudad, fechas de inicio y fin) es esencial, aprovecha el espacio para añadir matices. En lugar de simplemente “Ingeniería Industrial, Universidad Autónoma de Madrid, Madrid, 2018-2022”, considera:
- “Ingeniería Industrial, Universidad Autónoma de Madrid, Madrid (2018-2022). Proyecto fin de carrera: ‘Optimización de la cadena de suministro en empresas de logística’, con calificación de sobresaliente (9.5) y mención especial por su innovación.” Este ejemplo añade contexto, demuestra habilidades específicas (optimización, logística) y destaca un logro (sobresaliente y mención especial).
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Enfócate en los resultados: ¿Obtuviste alguna distinción académica? ¿Formaste parte de un proyecto de investigación relevante? ¿Colaboraste en publicaciones académicas? Incluir estos logros evidencia tu compromiso, tu capacidad de trabajo y tus habilidades. Por ejemplo: “Becario del Programa de Excelencia Académica de la UAM (2020-2022).” o “Participación en el proyecto de investigación ‘Análisis de…’ financiado por [Entidad], resultando en la publicación del artículo ‘…’ en la revista [Revista].”
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Adapta tu currículum: Si te presentas a diferentes puestos, considera adaptar la sección de formación académica para destacar la experiencia más relevante para cada oportunidad. No es necesario incluir todos tus estudios si algunos son irrelevantes para el puesto.
Ejemplo de una sección de formación académica bien estructurada:
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Máster en Inteligencia Artificial, Universidad Carlos III de Madrid, Madrid (2022-2024). Trabajo fin de máster: ‘Desarrollo de un sistema de recomendación basado en…’ con calificación de notable (8.5). Premio al mejor TFM por su aplicación práctica.
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Ingeniería Informática, Universidad Politécnica de Valencia, Valencia (2018-2022). Media de calificaciones: 8.2. Miembro del equipo ganador de la competición de programación interuniversitaria ‘Hackaton Valencia 2021’.
En resumen, la sección de formación académica no debe ser una simple lista. Con un poco de estrategia y una cuidadosa selección de la información, puedes convertirla en un poderoso elemento que refuerza tu candidatura y te ayuda a destacar entre la multitud. Recuerda que el objetivo es mostrar tus logros y cómo estos te preparan para el éxito en el puesto al que aspiras.
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