¿Cómo eliminan los fontaneros las obstrucciones?

El Arte de Desatascar: Técnicas de los Fontaneros para Tuberías Libres

Las tuberías obstruidas son un problema doméstico común, frustrante y, a veces, apestoso. Mientras que algunos recurren inmediatamente a productos químicos agresivos, los fontaneros profesionales poseen un arsenal de técnicas, desde las más sencillas hasta las más sofisticadas, para resolver estos inconvenientes sin dañar las cañerías ni el medio ambiente. La elección del método depende, naturalmente, de la gravedad y la naturaleza de la obstrucción.

Para obstrucciones menores, antes de recurrir a métodos más invasivos, muchos fontaneros emplean un truco sorprendentemente eficaz y respetuoso con el medio ambiente: el jabón lavavajillas. Su poder desengrasante, a menudo subestimado, es capaz de disolver residuos grasos, restos de comida y jabones que se acumulan en las tuberías, formando tapones que impiden el flujo normal del agua. El procedimiento es simple: se vierte una cantidad generosa de jabón lavavajillas en el desagüe, seguido de abundante agua caliente. La acción combinada del jabón y el agua caliente ayuda a emulsionar los residuos, facilitando su paso por la tubería. Este método es ideal para obstrucciones recientes y superficiales.

Sin embargo, cuando el jabón lavavajillas no es suficiente, los fontaneros cuentan con otras herramientas y técnicas, entre ellas:

• El Desatascador de Tazas (o ventosa): Un clásico de la fontanería. Su acción de succión y presión crea un vacío que, con la técnica adecuada, puede desalojar la obstrucción. Es importante asegurarse de que la ventosa selle completamente el desagüe para obtener resultados óptimos.

• La Serpiente o Manguera de Fontanero: Para obstrucciones más profundas, localizadas en la tubería misma, la serpiente – una herramienta flexible con una punta giratoria – es la solución. Se introduce en el desagüe y se manipula para atrapar y extraer el material que bloquea el paso del agua. Este método requiere cierta habilidad y es más efectivo para obstrucciones sólidas, como restos de cabello o materiales extraños.

• La Cámara de Inspección: En casos complejos, donde la naturaleza o la ubicación de la obstrucción son desconocidas, se recurre a una cámara de inspección. Esta pequeña cámara, conectada a un cable flexible, se introduce en la tubería, permitiendo al fontanero visualizar el interior y detectar con precisión la ubicación y el tipo de obstrucción. Esta tecnología es crucial para identificar problemas como las raíces de árboles que penetran las tuberías, o grietas internas.

• La Hidrolimpieza: En ocasiones, la obstrucción es demasiado grande o compacta como para ser removida con otros métodos. La hidrolimpieza, que consiste en el uso de una manguera a alta presión, permite desintegrar la obstrucción y limpiar a fondo la tubería. Este método es muy efectivo pero requiere equipo especializado.

En definitiva, la solución a una obstrucción depende del caso específico. Mientras que el jabón lavavajillas representa una primera línea de defensa eficaz y ecológica para problemas menores, los fontaneros disponen de un amplio abanico de herramientas y técnicas para afrontar obstrucciones de cualquier complejidad, garantizando un sistema de drenaje fluido y eficiente. El consejo clave es: ante una obstrucción persistente, contactar a un profesional para evitar daños mayores en las tuberías y el sistema de alcantarillado.