¿Cómo saber si es quemadura de primer o segundo grado?

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Las quemaduras de primer grado se limitan a la capa superficial de la piel, manifestándose con dolor, enrojecimiento e inflamación. En cambio, las de segundo grado penetran la capa subyacente, presentando además la formación de ampollas.
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¿Fuego en la piel? Cómo distinguir entre quemaduras de primer y segundo grado

Las quemaduras son lesiones comunes que pueden ocurrir en cualquier momento y lugar. Aunque la mayoría son leves, saber identificar su gravedad es fundamental para un tratamiento adecuado. Si bien siempre es recomendable buscar atención médica profesional, especialmente ante la duda, comprender las características básicas de las quemaduras de primer y segundo grado puede brindar calma y orientación inicial.

¿Qué diferencia una quemadura de primer grado de una de segundo grado? La clave reside en la profundidad de la lesión:

Quemaduras de primer grado:

  • Afectación: Se limitan a la epidermis, la capa más superficial de la piel.
  • Síntomas: El área afectada se presenta enrojecida, inflamada y con dolor, similar a una quemadura solar.
  • Aspecto: No hay presencia de ampollas, aunque la piel puede estar ligeramente tirante.

Quemaduras de segundo grado:

  • Afectación: Penetran la epidermis y alcanzan la dermis, la capa subyacente de la piel.
  • Síntomas: Además del enrojecimiento, la inflamación y el dolor, que suelen ser más intensos, aparecen ampollas llenas de líquido transparente. Estas ampollas son un mecanismo de defensa del cuerpo para proteger la herida.
  • Aspecto: La piel puede presentar un aspecto brillante o húmedo debido a la presencia de líquido en las ampollas. En algunos casos, la zona afectada puede presentar un color blanco o irregular.

¡Cuidado! Esta información no reemplaza la evaluación médica. Si experimentas una quemadura con ampollas extensas, dolor intenso, o si la quemadura afecta áreas sensibles como la cara, manos, pies, ingle o articulaciones, busca atención médica inmediata.

Recuerda, actuar con rapidez y conocimiento puede marcar la diferencia en la recuperación de una quemadura.