¿Cómo saber si estoy con el colon irritable?

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El síndrome de intestino irritable se diagnostica si experimentas dolor abdominal y gases, durante al menos tres días al mes, continuamente por tres meses o más. La persistencia de estos síntomas es clave para su identificación.

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¿Sufres de dolor abdominal crónico? Podría ser Síndrome de Intestino Irritable (SII)

El dolor abdominal es una molestia común, pero cuando se convierte en un compañero constante, es hora de prestar atención. Si experimentas molestias recurrentes en el abdomen, acompañadas de otros síntomas digestivos, podrías estar sufriendo del Síndrome de Intestino Irritable (SII). A diferencia de lo que muchos creen, el SII no es una enfermedad en sí misma, sino un trastorno funcional del intestino, lo que significa que sus síntomas son reales, pero no se encuentran daños estructurales o inflamaciones significativas en el intestino.

La clave para sospechar de SII reside en la cronificación y la frecuencia de los síntomas. No se trata simplemente de un malestar estomacal ocasional. El diagnóstico se basa en la persistencia de ciertos síntomas durante un periodo prolongado. Específicamente, se diagnostica SII si experimentas:

  • Dolor abdominal o malestar: Este dolor suele aliviarse con la defecación y se asocia frecuentemente con cambios en la frecuencia o consistencia de las heces. La localización del dolor puede variar, pero generalmente se centra en la parte inferior del abdomen.

  • Cambios en los hábitos intestinales: Esto puede manifestarse como diarrea, estreñimiento o una alternancia entre ambos. La consistencia de las heces es un factor crucial. Si las heces son acuosas o duras con frecuencia, es una señal de alerta.

  • Gases excesivos (flatulencia): La producción excesiva de gases es otro síntoma común del SII, pudiendo provocar hinchazón abdominal y sensación de distensión.

¿Cuándo sospechar del SII? La persistencia es la palabra clave. Si experimentas los síntomas mencionados anteriormente durante al menos tres días al mes, de forma continua durante tres meses o más, es fundamental consultar a un médico. No se autodiagnostique; un profesional de la salud realizará una evaluación completa, descartando otras posibles causas de los síntomas.

Más allá de los síntomas principales: Aunque el dolor abdominal, los cambios en el hábito intestinal y los gases son los más comunes, otras manifestaciones del SII pueden incluir:

  • Sensación de evacuación incompleta: A pesar de haber ido al baño, persiste la sensación de que aún quedan residuos en el intestino.
  • Mucosidad en las heces: La presencia de mucosidad visible en las heces puede ser otro indicador.
  • Hinchazón abdominal: Una sensación de distensión abdominal persistente.
  • Náuseas: Aunque menos frecuente que los otros síntomas, las náuseas pueden estar presentes.

Recuerda que este artículo tiene fines informativos y no sustituye la consulta con un profesional de la salud. Si tienes dudas o sospechas que podrías tener SII, agenda una cita con tu médico o gastroenterólogo para recibir un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado. El SII es una condición manejable, y con el tratamiento correcto, puedes mejorar significativamente tu calidad de vida.