¿Cómo sacar la orina acumulada?

Retención urinaria: una emergencia que requiere atención médica inmediata

La retención urinaria aguda, es decir, la incapacidad repentina de orinar a pesar de tener la vejiga llena, es una condición médica seria que requiere atención inmediata. Intentar solucionar este problema por cuenta propia sin la supervisión de un profesional de la salud es extremadamente peligroso y puede causar daños graves.

Si bien este artículo aborda el tema de la retención urinaria, es fundamental entender que no pretende ser una guía para automedicarse ni para sustituir el diagnóstico y tratamiento de un médico.

¿Cuáles son las causas de la retención urinaria?

Las causas de la retención urinaria son diversas y pueden variar desde obstrucciones físicas en el tracto urinario hasta problemas neurológicos que afectan la función de la vejiga. Algunas de las causas más comunes incluyen:

• Hiperplasia prostática benigna (HPB): El agrandamiento de la próstata puede presionar la uretra, dificultando el paso de la orina.
• Cálculos renales: Las piedras en el tracto urinario pueden bloquear el flujo de orina.
• Infecciones del tracto urinario (ITU): La inflamación causada por una infección puede obstruir la uretra.
• Efectos secundarios de medicamentos: Algunos medicamentos pueden causar retención urinaria como efecto secundario.
• Problemas neurológicos: Enfermedades como la esclerosis múltiple, la diabetes o lesiones en la médula espinal pueden afectar los nervios que controlan la vejiga.

¿Qué hacer ante la sospecha de retención urinaria?

Si experimentas dolor intenso en la parte baja del abdomen, sensación de vejiga llena que no se vacía al orinar o imposibilidad total de orinar, debes acudir al servicio de urgencias inmediatamente.

Un profesional de la salud realizará un examen físico y puede solicitar pruebas adicionales como un análisis de orina, un ultrasonido de la vejiga o una cistoscopia para determinar la causa de la retención urinaria.

El tratamiento inicial para la retención urinaria aguda suele ser la inserción de una sonda urinaria. Este procedimiento, realizado bajo condiciones estériles por un profesional médico, permite drenar la orina acumulada en la vejiga y aliviar la presión.

Es crucial recordar que intentar drenar la vejiga por cuenta propia puede causar lesiones graves y aumentar el riesgo de infecciones. Busca atención médica inmediata si experimentas síntomas de retención urinaria. Tu salud es lo primero.