¿Cómo se fija el intestino delgado?

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El intestino delgado se adhiere a la pared abdominal posterior a través de todo su trayecto, gracias al mesenterio.
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¿Cómo se fija el intestino delgado?

El intestino delgado, un órgano vital responsable de la absorción de nutrientes de los alimentos, está conectado a la pared abdominal posterior a lo largo de su recorrido. Esta fijación se logra mediante una estructura especializada conocida como mesenterio.

El Mesenterio

El mesenterio es una doble capa de peritoneo (la membrana que recubre la cavidad abdominal) que se extiende desde la pared abdominal posterior hasta el intestino delgado. Forma una estructura en forma de abanico que conecta el intestino delgado con la pared abdominal y proporciona un soporte y una vía para los vasos sanguíneos, los nervios y los vasos linfáticos.

Fijación del Intestino Delgado

El mesenterio fija el intestino delgado a la pared abdominal posterior de dos maneras:

  • Raíz del mesenterio: Esta es la parte más gruesa del mesenterio y se une a la columna vertebral lumbar. Sujeta firmemente el extremo superior del intestino delgado, el duodeno.
  • Mesenterio propiamente dicho: Esta parte del mesenterio se extiende desde la raíz hasta el borde mesentérico del intestino delgado. Proporciona soporte y movilidad al resto del intestino delgado.

Importancia de la Fijación

La fijación del intestino delgado a la pared abdominal posterior es esencial para varias funciones:

  • Soporte: El mesenterio brinda apoyo mecánico al intestino delgado, evitando que se desplace o se tuerza.
  • Movilidad: La sujeción flexible del mesenterio permite que el intestino delgado se mueva libremente durante la digestión, lo que facilita la mezcla y la absorción de nutrientes.
  • Irrigación sanguínea: Los vasos sanguíneos contenidos en el mesenterio suministran sangre al intestino delgado, lo que es crucial para su función metabólica.
  • Inervación: Los nervios en el mesenterio transmiten señales desde y hacia el intestino delgado, controlando su actividad motora y secretora.
  • Drenaje linfático: Los vasos linfáticos en el mesenterio drenan el líquido linfático del intestino delgado, eliminando los desechos y las sustancias extrañas.

Conclusión

El intestino delgado está fijado a la pared abdominal posterior mediante el mesenterio, una estructura esencial que proporciona soporte, movilidad, irrigación sanguínea, inervación y drenaje linfático. Esta fijación asegura que el intestino delgado pueda realizar sus funciones vitales de manera efectiva.