¿Cuándo añadir sal a la piscina?

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La sal se añade a la piscina al inicio de su funcionamiento y periódicamente durante la temporada de uso. La evaporación, los lavados de filtro y los rellenos de agua reducen gradualmente su concentración.
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El Arte de Mantener el Equilibrio: Cuándo y Cómo Añadir Sal a tu Piscina

Las piscinas de agua salada ofrecen una experiencia de baño más suave y saludable para la piel, además de mantener el agua más limpia y con un mantenimiento más eficiente que las piscinas convencionales. Sin embargo, para aprovechar al máximo sus beneficios, es crucial comprender cuándo y cómo añadir sal a tu piscina.

A diferencia de las piscinas de agua tratada con cloro, la sal no se disipa completamente; se convierte en un electrolito que produce cloro a través de un proceso electrolizador. Esto genera un agua más equilibrada, saludable y, a largo plazo, más económica en cuanto a productos químicos. Pero este proceso requiere un mantenimiento específico.

La sal se añade a la piscina al inicio de su funcionamiento, para alcanzar la concentración óptima de 3000 a 4000 ppm (partes por millón). Esta concentración inicial dependerá del modelo específico de tu equipo de electrolizador y las recomendaciones del fabricante. No es recomendable agregar la sal gradualmente. La concentración debe ser precisa desde el principio.

Pero el trabajo no termina ahí. La temporada de uso de una piscina implica una serie de factores que reducen la concentración de sal a lo largo del tiempo:

  • Evaporación: El calor del sol, y la temperatura del agua, provocan la evaporación, lo que reduce el volumen de agua y, consecuentemente, la concentración de sal.
  • Lavados de filtro: Al limpiar el filtro de la piscina, se pierde un poco de agua y sal. Frecuentemente, estos lavados suelen ser regulares, requiriendo una atención extra en la adición de sal.
  • Rellenos de agua: Si necesitas rellenar la piscina con agua debido a la evaporación o alguna otra pérdida, el agua nueva diluye la sal existente y requiere agregar más para restaurar la concentración.
  • Naturaleza del agua: La dureza del agua, y otras características inherentes al entorno geográfico, pueden influir en la rapidez con la que se pierde sal de la piscina.

¿Cuándo es el momento de agregar más sal?

La respuesta no es un número mágico de días. La clave radica en la monitorización. Existen medidores de sal en el mercado que permiten medir la concentración de sal con precisión, mostrándote los niveles actuales. Comparando los datos de estos medidores con los niveles óptimos para tu piscina (3000-4000 ppm), sabrás si necesitas agregar más. No esperes a que la concentración baje significativamente. Un ligero ajuste regular previene desequilibrios en la calidad del agua.

En resumen, la adición de sal en una piscina de agua salada no es un evento único. Requiere una vigilancia continua y un seguimiento regular de los niveles de sal. Al mantener un ojo atento y utilizar un medidor de sal, puedes garantizar la salud, la eficiencia y la vida útil de tu sistema electrolizador de cloro y disfrutar de una piscina de agua salada limpia y saludable durante toda la temporada.