¿Cuánto dura el sangrado por infección?

¿Cuánto tiempo dura el sangrado por infección?

Cada mujer experimenta ciclos menstruales únicos, con variaciones en la duración y la intensidad del sangrado. En general, la mayoría de las mujeres tienen ciclos que duran entre 24 y 34 días, con un sangrado de 4 a 7 días.

Sin embargo, ciertas infecciones pueden alterar este patrón de sangrado normal, lo que lleva a un sangrado más prolongado o intenso.

¿Qué es el sangrado por infección?

El sangrado por infección es el sangrado vaginal que se produce como resultado de una infección del útero, las trompas de Falopio o el cuello uterino. Suele ocurrir fuera de los periodos menstruales normales y puede indicar una afección médica subyacente.

Causas del sangrado por infección

Las infecciones que pueden causar sangrado vaginal incluyen:

• Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP): Una infección de los órganos reproductores femeninos, incluidas las trompas de Falopio, los ovarios y el útero.
• Enfermedad de transmisión sexual (ETS): Como clamidia, gonorrea o sífilis.
• Endometritis: Una infección del revestimiento del útero.
• Cervicitis: Una infección del cuello uterino.
• Vaginosis bacteriana: Un desequilibrio bacteriano en la vagina.

Síntomas del sangrado por infección

Además del sangrado vaginal inusual, otros síntomas de infección pueden incluir:

• Dolor pélvico o abdominal
• Fiebre o escalofríos
• Flujo vaginal anormal
• Olor vaginal desagradable
• Micción frecuente o dolorosa

Duración del sangrado por infección

La duración del sangrado por infección puede variar según el tipo de infección y su gravedad. En general, el sangrado puede durar desde unos pocos días hasta varias semanas.

Es importante tener en cuenta que el sangrado por infección no siempre es intenso. Puede presentarse como manchas leves o un flujo más abundante.

Cuándo buscar atención médica

Cualquier caso de sangrado vaginal inusual fuera de los periodos menstruales normales debe ser evaluado por un médico. Es especialmente importante buscar atención médica inmediata si se presentan otros síntomas, como dolor, fiebre o flujo vaginal anormal.

Un diagnóstico y tratamiento tempranos pueden ayudar a controlar la infección y prevenir complicaciones más graves.