¿Por qué se me sube el alcohol tan rápido?

¿Por qué me sube el alcohol tan rápido? La ciencia detrás de tu tolerancia

Todos hemos experimentado esa sensación de “subidón” después de unas copas, pero ¿alguna vez te has preguntado por qué a algunos les afecta el alcohol más rápido que a otros? La verdad es que la velocidad a la que el alcohol se absorbe en el cuerpo varía significativamente entre individuos.

¿A qué se debe esta diferencia?

La respuesta radica en una combinación de factores:

1. Peso y Constitución Física:

Las personas con un peso menor tienden a sentir los efectos del alcohol más rápido. Esto se debe a que el alcohol se distribuye en el cuerpo en función de la cantidad de agua corporal, y las personas más ligeras tienen menos agua.

2. Cantidad de Comida en el Estómago:

Un estómago vacío absorbe el alcohol mucho más rápido que uno lleno. Esto se debe a que la comida actúa como una barrera, ralentizando la absorción del alcohol en el torrente sanguíneo.

3. Metabolismo Individual:

El cuerpo metaboliza el alcohol a diferentes velocidades dependiendo de factores como la genética, la salud general y el consumo habitual de alcohol. Algunos individuos poseen enzimas hepáticas más eficientes para descomponer el alcohol, mientras que otros lo hacen más lentamente.

4. Otros Factores:

• Género: Las mujeres tienden a metabolizar el alcohol más lentamente que los hombres.
• Estado de Salud: La deshidratación, la fatiga o ciertas condiciones médicas pueden afectar la velocidad de absorción.
• Medicamentos: Algunos medicamentos pueden interactuar con el alcohol y aumentar sus efectos.

¿Qué puedo hacer para controlar mi tolerancia?

Es importante ser consciente de los factores que influyen en tu tolerancia al alcohol. Si notas que te sube rápidamente, puedes intentar:

• Comer algo antes de beber: Un estómago lleno ralentiza la absorción.
• Beber con moderación: Evita beber demasiado rápido.
• Hidratarte adecuadamente: Beber agua entre las copas ayuda a diluir el alcohol.
• Escuchar a tu cuerpo: Presta atención a cómo te sientes y no te fuerces a beber más de lo que puedas manejar.

Recuerda que la clave para disfrutar del alcohol de forma segura es el consumo responsable.

Si te preocupan tus patrones de consumo o sientes que necesitas ayuda, no dudes en consultar con un profesional de la salud.