¿Qué causa el adormecimiento de la boca?

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El entumecimiento bucal, a veces llamado parestesia, suele afectar labios o mandíbula por daño al nervio dentario inferior, frecuentemente tras procedimientos dentales. Aunque poco común, este adormecimiento puede ser persistente, requiriendo atención médica para su diagnóstico y tratamiento.

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El Entumecimiento Bucal: Un Viaje por los Nervios de la Cara

El entumecimiento en la boca, o parestesia oral, es una sensación incómoda e inusual que se caracteriza por la pérdida de sensibilidad, hormigueo, o un adormecimiento en los labios, la lengua, la mandíbula o incluso la totalidad de la boca. Si bien a menudo es transitorio y se resuelve por sí solo, comprender sus posibles causas es crucial para abordar el problema de manera efectiva. Contrario a la creencia popular, no siempre se trata de una simple “caída de la circulación”.

Causas más comunes del entumecimiento bucal:

  • Procedimientos dentales: Esta es la causa más frecuente del entumecimiento bucal, especialmente en la mandíbula inferior. La inyección de anestesia local durante extracciones, implantes o tratamientos de conducto puede dañar temporalmente el nervio alveolar inferior, responsable de la sensibilidad en esa zona. En la mayoría de los casos, la sensación regresa en unas pocas horas o días. Sin embargo, en algunos pacientes, el daño nervioso puede ser más severo, resultando en un entumecimiento persistente o incluso permanente. La técnica del procedimiento y la anatomía individual del paciente juegan un papel crucial en la probabilidad de esta complicación.

  • Traumatismos: Un golpe fuerte en la cara, una fractura mandibular o un traumatismo craneoencefálico pueden lesionar los nervios faciales, causando entumecimiento en la boca o en áreas adyacentes. La gravedad del entumecimiento dependerá de la severidad del trauma y la extensión del daño nervioso.

  • Infecciones: Infecciones de las vías respiratorias superiores, como la gripe o la mononucleosis infecciosa, pueden, en casos raros, manifestarse con un leve entumecimiento bucal. Esto suele estar asociado a inflamación y suele desaparecer una vez que la infección se resuelve. Sin embargo, infecciones dentales más severas (abscesos) pueden ejercer presión sobre los nervios y causar parestesia.

  • Afecciones neurológicas: En casos menos frecuentes, el entumecimiento bucal puede ser un síntoma de enfermedades neurológicas subyacentes, como la esclerosis múltiple, la enfermedad de Lyme, o la neuropatía diabética. Estas condiciones afectan el sistema nervioso, pudiendo causar parestesia en diferentes partes del cuerpo, incluyendo la boca.

  • Déficit de vitaminas: Una deficiencia de vitaminas del complejo B, especialmente vitamina B12, puede afectar la función nerviosa y provocar entumecimiento en diversas partes del cuerpo, incluyendo la boca.

  • Tumores: Aunque poco común, un tumor en la cabeza o el cuello puede comprimir los nervios craneales, causando entumecimiento en la boca y otras áreas faciales. Es fundamental destacar que esta es una posibilidad que debe ser descartada por un profesional médico.

  • Efectos secundarios medicamentosos: Ciertos medicamentos, como algunos quimioterapéuticos, pueden tener como efecto secundario el entumecimiento bucal.

¿Cuándo consultar a un médico?

Si el entumecimiento bucal persiste durante más de unos pocos días, es progresivo, se acompaña de dolor intenso, debilidad muscular facial, dificultad para hablar o tragar, o si se presentan otros síntomas neurológicos, es crucial buscar atención médica inmediata. Un diagnóstico preciso permitirá determinar la causa subyacente y establecer el tratamiento adecuado, que puede variar desde analgésicos y antiinflamatorios hasta fisioterapia o, en casos más graves, cirugía.

Este artículo tiene fines informativos y no sustituye la consulta con un profesional de la salud. Ante cualquier duda o preocupación sobre el entumecimiento bucal, es fundamental buscar la opinión de un dentista, un neurólogo o un médico general para recibir un diagnóstico y tratamiento personalizado.