¿Qué diferencia hay entre el reflujo y la acidez?

La sutil diferencia entre reflujo y acidez: más que un simple ardor

A menudo se usan indistintamente, pero reflujo gastroesofágico (RGE) y acidez estomacal son dos conceptos distintos, aunque estrechamente relacionados. Comprender esta diferencia es crucial para abordar eficazmente los síntomas y buscar el tratamiento adecuado.

La acidez estomacal, en esencia, es una sensación. Se caracteriza por un ardor desagradable detrás del esternón, que puede irradiarse hacia la garganta o incluso la boca. Es una sensación de quemazón intensa y, a veces, punzante, que muchos describen como una sensación de “fuego” en el pecho. Esta sensación incómoda es, sin embargo, sólo un síntoma.

El reflujo gastroesofágico (RGE), por otro lado, es el proceso fisiológico que subyace a la acidez, entre otros síntomas. Se produce cuando el esfínter esofágico inferior (EEI), una válvula muscular que separa el estómago del esófago, se relaja de manera inapropiada o se debilita. Esta relajación permite que el contenido del estómago, incluyendo ácido gástrico, jugos digestivos y alimentos parcialmente digeridos, refluyan hacia el esófago. Este reflujo es el causante de la acidez, pero no se limita a ella.

La acidez, por lo tanto, es una manifestación del RGE, pero no el único síntoma. El reflujo gastroesofágico puede manifestarse de diversas maneras, incluyendo:

• Acidez estomacal (pirosis): La sensación de ardor ya descrita.
• Regurgitación: El regreso de los contenidos estomacales a la boca.
• Náuseas y vómitos: Sentimientos de malestar estomacal que pueden o no estar acompañados de vómitos.
• Dolor torácico: Dolor en el pecho que puede confundirse con un dolor cardíaco.
• Dificultad para tragar (disfagia): Sensación de que los alimentos se atascan al tragar.
• Tos crónica: Tos persistente que no responde al tratamiento habitual.
• Ronquera: Cambios en la voz.

En resumen, la acidez es un síntoma común, pero no el único, del reflujo gastroesofágico. Mientras que la acidez se limita a la sensación de ardor, el RGE engloba el proceso fisiológico subyacente y sus diversas manifestaciones clínicas. Si experimentas síntomas recurrentes de reflujo o acidez, es fundamental consultar a un médico para un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado, ya que el RGE, si no se trata, puede causar complicaciones a largo plazo como esofagitis erosiva o incluso cáncer de esófago.