¿Qué enfermedades provocan hormigueo?

Hormigueo: Un síntoma que alerta sobre diversas afecciones

El hormigueo, esa sensación de pinchazos o adormecimiento que recorre la piel, puede ser un síntoma molesto y a veces preocupante. Aunque puede tener causas benignas, como la presión sobre un nervio al dormir en una posición incómoda, también puede ser un indicador de enfermedades más serias.

Diversas afecciones neurológicas pueden provocar hormigueo, incluyendo:

• Síndrome del túnel carpiano: Esta condición afecta al nervio mediano, que recorre la mano y la muñeca, causando dolor, entumecimiento y hormigueo en los dedos pulgar, índice, medio y anular.
• Diabetes: La diabetes, especialmente la mal controlada, puede dañar los nervios, provocando hormigueo en las manos, los pies, las piernas y otras partes del cuerpo.
• Migrañas: Las migrañas pueden manifestarse con una variedad de síntomas, incluyendo el hormigueo, generalmente en un lado del cuerpo.
• Esclerosis múltiple: Esta enfermedad autoinmune ataca el sistema nervioso central, afectando el movimiento, la coordinación y la sensibilidad, y puede causar hormigueo en diferentes partes del cuerpo.
• Eventos cerebrovasculares: Los accidentes cerebrovasculares (ACV) o los ataques isquémicos transitorios (AIT) pueden dañar los vasos sanguíneos del cerebro, provocando síntomas como hormigueo, debilidad o parálisis.

Otros factores que pueden desencadenar hormigueo incluyen:

• Convulsiones: Las convulsiones pueden provocar hormigueo en las extremidades o en la cara.
• Déficit de vitamina B12: La deficiencia de vitamina B12 puede afectar al sistema nervioso, causando hormigueo, debilidad y problemas de equilibrio.
• Enfermedades de la tiroides: La tiroiditis de Hashimoto, una enfermedad autoinmune que afecta la tiroides, puede causar hormigueo en las manos y los pies.

Es fundamental consultar a un médico si el hormigueo:

• Es persistente o empeora con el tiempo.
• Afecta a una parte significativa del cuerpo.
• Se acompaña de otros síntomas como debilidad, pérdida de equilibrio, visión borrosa o dificultad para hablar.

Un diagnóstico temprano es crucial para tratar la causa del hormigueo y evitar complicaciones. No dudes en consultar con un profesional médico si experimentas este síntoma para determinar su origen y obtener el tratamiento adecuado.