¿Qué hacer para que no vuelva la candidiasis?

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Para evitar la recurrencia de la candidiasis, además del tratamiento antimicótico (cremas, óvulos o comprimidos como miconazol o terconazol), es fundamental mantener una higiene íntima adecuada, usar ropa interior de algodón transpirable y evitar el uso de jabones perfumados. Una alimentación equilibrada también contribuye a la salud vaginal.

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Adiós a la Candidiasis: Guía para prevenir su regreso

La candidiasis, una infección vaginal común causada por el hongo Candida albicans, puede ser muy molesta. Si bien el tratamiento médico con antifúngicos como miconazol o terconazol (en cremas, óvulos o comprimidos) es crucial para eliminar la infección activa, su efectividad se ve significativamente potenciada por la adopción de hábitos que previenen su reaparición. La clave reside en comprender los factores que favorecen el crecimiento de Candida y actuar en consecuencia. Este artículo ofrece una guía práctica para evitar que la candidiasis vuelva a perturbar tu vida.

Más allá del tratamiento antifúngico: un enfoque integral

Si bien la medicación es esencial para erradicar la infección presente, no es suficiente para garantizar su ausencia a largo plazo. Un enfoque holístico que aborde los factores de riesgo es fundamental para prevenir la recurrencia. Esto implica una serie de cambios en tu estilo de vida, centrados en:

1. Higiene íntima responsable: La limpieza excesiva con jabones perfumados o duchas vaginales puede alterar el pH vaginal natural, creando un ambiente propicio para el crecimiento de Candida. Opta por un lavado suave con agua tibia y un jabón íntimo de pH neutro, sin perfumes ni colorantes. Seca la zona genital cuidadosamente con una toalla limpia, evitando frotar con fuerza.

2. Ropa interior transpirable: Las prendas de algodón permiten una mejor ventilación, evitando la humedad excesiva que favorece la proliferación del hongo. Evita la ropa interior ajustada, sintética o húmeda, especialmente durante periodos prolongados. Prioriza el algodón y materiales naturales.

3. Alimentación consciente: Una dieta equilibrada juega un papel crucial en la salud vaginal. Reduce el consumo de azúcares refinados y alimentos procesados, ya que el exceso de azúcar puede alimentar el crecimiento de Candida. Prioriza una dieta rica en frutas, verduras, proteínas magras y cereales integrales. Incluir probióticos en la dieta, como yogur con cultivos vivos o suplementos, puede ayudar a restaurar el equilibrio de la flora vaginal.

4. Control del estrés: El estrés puede afectar el sistema inmunológico, aumentando la susceptibilidad a las infecciones. Incorpora técnicas de manejo del estrés en tu rutina diaria, como yoga, meditación, ejercicio regular o actividades que te relajen.

5. Prevención de la reinfección: Si tu pareja también presenta síntomas de candidiasis, es importante que ambos reciban tratamiento simultáneamente para evitar la reinfección.

6. Hidratación adecuada: Beber suficiente agua ayuda a mantener el cuerpo hidratado, incluyendo el tracto urogenital, lo que puede contribuir a un ambiente vaginal menos susceptible a las infecciones.

Cuándo consultar a un profesional:

Si la candidiasis recurre con frecuencia a pesar de seguir estas recomendaciones, o si presentas síntomas severos o inusuales, es fundamental consultar a un ginecólogo. Él o ella podrá realizar un diagnóstico preciso y determinar si existen otras causas subyacentes que contribuyen a la recurrencia de la infección.

En resumen, prevenir la recurrencia de la candidiasis requiere un enfoque multifacético que combine el tratamiento médico con cambios en el estilo de vida. Priorizando la higiene adecuada, la alimentación saludable, la gestión del estrés y la elección de ropa interior apropiada, podrás reducir significativamente el riesgo de futuras infecciones y mejorar tu salud vaginal a largo plazo.