¿Qué pasa cuando hay sangrado en el cuello uterino?

El Sangrado Cervical: Un Síntoma que Requiere Atención Médica

El sangrado cervical, es decir, el sangrado que proviene del cuello uterino, es un síntoma que, si bien puede ser inofensivo en muchos casos, requiere siempre una evaluación médica exhaustiva. Su aparición puede ser un indicio de diversas afecciones, que van desde problemas benignos y fácilmente tratables hasta situaciones que requieren atención inmediata. La clave reside en identificar la causa subyacente para instaurar el tratamiento adecuado.

A diferencia del sangrado menstrual, el sangrado cervical suele presentarse de forma irregular, fuera del período menstrual. Puede manifestarse como un ligero manchado, un sangrado abundante o incluso como una hemorragia. La intensidad y las características del sangrado pueden variar dependiendo de la causa.

Entre las causas más comunes de sangrado cervical se encuentran:

Afecciones Benignas:

• Pólipos cervicales: Estas pequeñas formaciones benignas en el cuello uterino suelen sangrar fácilmente al contacto, incluso durante las relaciones sexuales. Son fáciles de detectar mediante un examen pélvico y, en la mayoría de los casos, se pueden extirpar fácilmente.
• Infecciones del tracto genital inferior: Infecciones como la vaginosis bacteriana, la tricomoniasis o la candidiasis pueden provocar inflamación y sangrado cervical. El tratamiento antibiótico o antifúngico suele resolver el problema.
• Cervicitis: La inflamación del cuello uterino, que puede tener diversas causas (infecciosas o no), puede manifestarse con sangrado.
• Cambios hormonales: Fluctuaciones hormonales, especialmente en la perimenopausia, pueden causar un sangrado irregular, incluyendo el sangrado cervical.

Complicaciones del Embarazo:

• Aborto espontáneo: Un sangrado cervical acompañado de dolor abdominal podría indicar un aborto espontáneo. Esta situación requiere atención médica inmediata.
• Embarazo ectópico: Un embarazo que se desarrolla fuera del útero, generalmente en las trompas de Falopio, puede causar sangrado vaginal y dolor abdominal intenso. Es una emergencia médica que requiere tratamiento urgente.

Tumores (Benignos y Malignos):

Aunque menos frecuentes, el sangrado cervical puede ser un signo de tumores benignos como leiomiomas (fibromas uterinos) o de tumores malignos como el cáncer de cuello uterino. La detección temprana es crucial para un pronóstico favorable.

La importancia de la evaluación médica:

Es fundamental consultar a un ginecólogo ante cualquier episodio de sangrado cervical, especialmente si:

• El sangrado es abundante o persistente.
• Se acompaña de dolor abdominal intenso.
• Se presenta fuera del período menstrual.
• Se produce después de las relaciones sexuales.
• Se presenta en mujeres posmenopáusicas.

El médico realizará una historia clínica detallada, un examen pélvico, y probablemente solicitará pruebas adicionales como una citología (Pap test), una colposcopia (examen visual ampliado del cuello uterino) o una biopsia para determinar la causa del sangrado y establecer el tratamiento más adecuado. No se debe autodiagnosticar ni retrasar la consulta médica, ya que la detección temprana de posibles patologías graves puede salvar vidas. Recuerda que la salud femenina requiere atención y vigilancia continua.