¿Qué pasa cuando la vejiga no se vacia por completo?

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La retención urinaria, o incapacidad de vaciar completamente la vejiga, puede deberse a obstrucciones, estrechamientos uretrales o debilidad muscular vesical. Esto deja residuos de orina, aumentando el riesgo de infecciones y complicaciones urinarias. La consulta médica es crucial para diagnosticar y tratar la causa subyacente.
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La retención urinaria: cuando la vejiga no se vacía por completo

La retención urinaria, también conocida como vejiga neurógena o disfunción miccional, es una condición en la que la vejiga no puede vaciarse por completo. Esta afección puede provocar una serie de complicaciones, por lo que es importante buscar atención médica si se experimentan síntomas de retención urinaria.

Causas de la retención urinaria

La retención urinaria puede ser causada por una variedad de factores, que incluyen:

  • Obstrucciones: Estas pueden incluir cálculos en la vejiga, tumores o agrandamiento de la próstata en los hombres.
  • Estrechamientos uretrales: La uretra es el conducto que transporta la orina desde la vejiga al exterior del cuerpo. Los estrechamientos en la uretra pueden dificultar que la orina fluya libremente.
  • Debilidad muscular vesical: Los músculos de la vejiga deben contraerse para expulsar la orina. La debilidad o daño de estos músculos puede provocar retención urinaria.

Síntomas de la retención urinaria

Los síntomas de la retención urinaria pueden incluir:

  • Dificultad o incapacidad para orinar
  • Goteo de orina
  • Sensación de vaciado incompleto después de orinar
  • Aumento de la frecuencia urinaria
  • Dolor o ardor al orinar
  • Infecciones urinarias recurrentes

Complicaciones de la retención urinaria

Si no se trata, la retención urinaria puede provocar una serie de complicaciones, que incluyen:

  • Infecciones urinarias: Los residuos de orina en la vejiga crean un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias.
  • Cálculos en la vejiga: Los minerales en la orina pueden cristalizarse y formar cálculos, que pueden causar obstrucciones y dolor.
  • Daño renal: La retención urinaria prolongada puede provocar presión sobre los riñones, lo que lleva a daño renal.
  • Distensión de la vejiga: La vejiga puede estirarse y debilitarse con el tiempo debido a la acumulación de orina.

Diagnóstico y tratamiento de la retención urinaria

El diagnóstico de la retención urinaria generalmente implica un examen físico y una historia clínica. El médico también puede ordenar pruebas adicionales, como un análisis de orina, una ecografía de la vejiga o una cistoscopia (un procedimiento que utiliza una cámara para examinar el interior de la vejiga).

El tratamiento de la retención urinaria depende de la causa subyacente. Las opciones de tratamiento pueden incluir:

  • Medicamentos: Los medicamentos pueden usarse para relajar los músculos del esfínter uretral o para fortalecer los músculos de la vejiga.
  • Cirugía: La cirugía puede ser necesaria para eliminar obstrucciones o reparar estrechamientos uretrales.
  • Cateterismo: Un catéter es un tubo delgado que se inserta en la vejiga para drenar la orina. Esta puede ser una medida temporal o permanente, según la causa de la retención urinaria.
  • Ejercicios de rehabilitación del suelo pélvico: Estos ejercicios pueden ayudar a fortalecer los músculos que sostienen la vejiga y la uretra.

Es importante buscar atención médica si se experimentan síntomas de retención urinaria. El diagnóstico y tratamiento tempranos pueden ayudar a prevenir complicaciones y restaurar la función normal de la vejiga.