¿Qué pasa en tu cerebro cuando terminas una relación?

3 ver

Al terminar una relación, el cerebro entra en abstinencia de dopamina (DA), lo que lleva a comportamientos erráticos como vigilar las redes sociales, enviar mensajes y hacer llamadas telefónicas en busca de la DA perdida.

Comentarios 0 gustos

El impacto cerebral de una ruptura amorosa

El término de una relación romántica no es solo un hecho emocionalmente doloroso, sino que también desencadena cambios significativos en el cerebro humano. Estos cambios están relacionados principalmente con la falta de dopamina.

La abstinencia de dopamina

La dopamina es un neurotransmisor que desempeña un papel crucial en la motivación, el placer y la recompensa. Durante una relación, la interacción con la pareja estimula la liberación de dopamina, lo que refuerza el vínculo afectivo.

Cuando una relación termina, el cerebro se ve privado de esta fuente de dopamina, lo que lleva a una especie de abstinencia. Los síntomas de esta abstinencia incluyen:

  • Ansiedad
  • Tristeza
  • Insomnio
  • Pérdida de apetito
  • Dificultad para concentrarse

Comportamientos erráticos

La abstinencia de dopamina también puede conducir a comportamientos erráticos en un intento de recuperar el placer y la recompensa perdidos. Estos comportamientos incluyen:

  • Vigilar las redes sociales de la expareja
  • Enviar mensajes y hacer llamadas telefónicas a la expareja
  • Intentar reconciliar la relación

Estos comportamientos son impulsados por el anhelo de dopamina, pero suelen ser contraproducentes y pueden prolongar el dolor emocional.

Mecanismos de afrontamiento

Para sobrellevar los cambios cerebrales que acompañan a una ruptura amorosa, es esencial adoptar mecanismos de afrontamiento saludables. Estos mecanismos incluyen:

  • Buscar apoyo social
  • Participar en actividades que liberen endorfinas, como el ejercicio
  • Practicar técnicas de atención plena
  • Establecer límites claros con la expareja

Con el tiempo, el cerebro se adapta a la falta de dopamina y los síntomas de abstinencia disminuyen gradualmente. Sin embargo, la recuperación completa de una ruptura puede llevar meses o incluso años. Es importante ser paciente consigo mismo y buscar apoyo profesional si es necesario.