¿Qué pasa si me quitan el sarro de los dientes?

Adiós al sarro: ¿Qué esperar después de una limpieza dental profesional?

La acumulación de sarro en los dientes es un problema común que, si no se trata, puede tener consecuencias negativas para la salud bucal. Más allá de la estética, el sarro actúa como un imán para las bacterias, contribuyendo al desarrollo de enfermedades como la gingivitis y la periodontitis. Por eso, la eliminación profesional del sarro es crucial para mantener una sonrisa sana y radiante. Pero, ¿qué sucede después de este procedimiento? ¿Qué cambios podemos esperar?

Eliminar el sarro no es solo una cuestión de estética, es una inversión en salud bucal a largo plazo. Al retirar esa capa endurecida de placa bacteriana, se eliminan los nichos donde las bacterias proliferan y causan estragos. Esto se traduce en una serie de beneficios inmediatos y a futuro.

Inmediatamente después de la limpieza, es posible experimentar:

• Mayor sensibilidad dental: Especialmente al frío, al calor o a los dulces. Esta sensibilidad suele ser temporal y desaparece en unos días. Utilizar pasta dental para dientes sensibles puede ayudar a aliviar estas molestias.
• Encías ligeramente inflamadas o sangrantes: Es una reacción normal al proceso de raspado y pulido. La inflamación debería remitir en poco tiempo. Enjuagues con agua tibia con sal pueden contribuir a la cicatrización.
• Una sensación de “limpieza profunda” y suavidad en los dientes: La ausencia del sarro deja una superficie lisa y pulida, facilitando la higiene bucal diaria y la sensación de frescura.
• Un tono más claro en los dientes: Al eliminar la placa y el sarro, que suelen tener un color amarillento o marrón, los dientes recuperan su color natural, luciendo más blancos y brillantes.

A largo plazo, la eliminación del sarro contribuye a:

• Prevenir la gingivitis y la periodontitis: Al eliminar el principal foco de bacterias, se reduce significativamente el riesgo de desarrollar estas enfermedades inflamatorias de las encías.
• Mantener la integridad de los dientes y el hueso: La periodontitis, en etapas avanzadas, puede provocar la pérdida de hueso y dientes. Eliminar el sarro ayuda a prevenir esta complicación.
• Mejorar el aliento: El sarro es un caldo de cultivo para las bacterias que causan el mal aliento. Su eliminación contribuye a una mejor higiene bucal y un aliento más fresco.
• Facilitar la higiene bucal diaria: Con una superficie dental lisa y libre de sarro, el cepillado y el uso del hilo dental son más efectivos, optimizando la limpieza y previniendo la formación de nueva placa.

Es importante recordar que la eliminación del sarro es un procedimiento que debe realizar un profesional de la odontología. Además, mantener una buena higiene bucal en casa, con un cepillado correcto, uso de hilo dental y enjuague bucal, es fundamental para prolongar los beneficios de la limpieza y prevenir la reaparición del sarro. Consulta con tu dentista para establecer un programa de limpieza profesional adaptado a tus necesidades. Tu sonrisa te lo agradecerá.