¿Qué pasa si un recién nacido traga agua?

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Si un recién nacido traga agua, puede desarrollar hiponatremia, una afección peligrosa que disminuye los niveles de sodio en sangre. Esto puede causar convulsiones, espasmos musculares, náuseas y, potencialmente, la muerte.

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¿Qué sucede si un recién nacido traga agua?

El agua es esencial para la vida, pero para un recién nacido, ingerirla puede ser peligroso. A diferencia de los adultos, los recién nacidos no pueden regular adecuadamente los niveles de sodio en su sangre.

Hiponatremia: una afección potencialmente mortal

Cuando un recién nacido ingiere agua, sus niveles de sodio en sangre disminuyen, lo que lleva a una afección llamada hiponatremia. El sodio es un electrolito esencial que ayuda a regular el equilibrio de fluidos, la función muscular y la actividad cerebral.

La hiponatremia en los recién nacidos puede causar una variedad de síntomas graves, que incluyen:

  • Convulsiones
  • Espasmos musculares
  • Náuseas
  • Letargo
  • Disminución de la respuesta

En casos graves, la hiponatremia puede provocar la muerte.

Causas de la ingestión de agua en recién nacidos

Existen varias formas en que un recién nacido puede tragar agua:

  • Baño: Los recién nacidos pueden tragar agua durante el baño si se sumergen demasiado o no se sostienen adecuadamente.
  • Limpieza: Al limpiar al recién nacido, el uso excesivo de esponjas o toallitas húmedas puede provocar la ingestión de agua.
  • Cuidado de la nariz: El uso de gotas nasales o un aspirador nasal puede introducir agua en la boca del recién nacido.
  • Alimentación con biberón: Los recién nacidos pueden tragar agua si el biberón se sostiene en un ángulo inadecuado o si fluye demasiado rápido.

Prevención y tratamiento

Para prevenir la ingestión de agua en recién nacidos, es importante:

  • Sostenerlos adecuadamente durante el baño.
  • Usar esponjas o toallitas húmedas con moderación durante la limpieza.
  • Evitar el uso excesivo de gotas nasales o aspiradores nasales.
  • Asegurarse de que los biberones se sostengan en un ángulo adecuado y que el flujo sea lento.

Si sospecha que su recién nacido ha tragado agua, busque atención médica inmediata. El tratamiento generalmente implica administrar líquidos intravenosos para aumentar los niveles de sodio en sangre.