¿Qué puedo tomar si siento que me quiere dar un infarto?

Ante la sospecha de infarto: La aspirina, una posible ayuda bajo supervisión médica

Sufrir un infarto es una situación de emergencia que requiere atención médica inmediata. Sin embargo, mientras se espera la llegada de la ayuda profesional, existen medidas que pueden tomarse para ayudar a mitigar el daño potencial. Una de ellas es la administración de aspirina.

¿Por qué la aspirina?

La aspirina es un fármaco anticoagulante que ayuda a disminuir la formación de coágulos sanguíneos. En el caso de un infarto, la obstrucción de una arteria coronaria por un coágulo impide el flujo sanguíneo al corazón. La aspirina ayuda a romper estos coágulos y mejorar el riego sanguíneo al músculo cardíaco.

Uso bajo supervisión médica

Es importante destacar que la aspirina no debe tomarse sin la supervisión de un profesional sanitario. La aspirina tiene efectos secundarios potenciales, como sangrado gastrointestinal, y su uso indebido puede ser perjudicial.

Por lo tanto, si se sospecha un infarto, se debe llamar a emergencias de inmediato y seguir sus instrucciones. Si se recomienda tomar aspirina, es esencial hacerlo bajo estricta supervisión médica.

Llamada de emergencia

La atención médica rápida es crucial en caso de un infarto. No se debe dudar en llamar al número de emergencias local (por ejemplo, 911 en Estados Unidos) si se experimentan:

• Dolor torácico opresivo o en presión
• Dolor en el brazo izquierdo, la espalda o la mandíbula
• Dificultad para respirar
• Sudoración fría
• Náuseas o vómitos

Conclusión

Ante la sospecha de un infarto, tomar aspirina bajo supervisión médica puede ayudar a reducir el daño cardíaco. Sin embargo, la atención médica inmediata es esencial. No se debe dudar en llamar a emergencias y seguir las instrucciones de los profesionales sanitarios. El tiempo es fundamental para mejorar las posibilidades de supervivencia y recuperación.