¿Qué usan los dentistas para quitar el sarro?

Herramientas del Odontólogo para Eliminar el Sarro

El sarro es una acumulación dura y calcificada de placa que se adhiere a los dientes. Si no se elimina, puede provocar caries e incluso pérdida de dientes. Los dentistas utilizan una variedad de herramientas para eliminar el sarro, incluyendo:

Raspadores Ultrasónicos

Los raspadores ultrasónicos son dispositivos que emiten ondas sonoras de alta frecuencia que hacen vibrar el sarro y lo rompen. Estos raspadores son muy eficaces para eliminar incluso el sarro más duro. Suelen utilizarse para eliminar la mayor parte del sarro de los dientes.

Raspadores Manuales

Los raspadores manuales son instrumentos afilados que se utilizan para raspar el sarro de la superficie de los dientes. Estos raspadores suelen utilizarse para eliminar el sarro que no puede eliminarse con los raspadores ultrasónicos.

Curetas

Las curetas son instrumentos similares a los raspadores, pero tienen un borde más afilado. Se utilizan para raspar el sarro de zonas de difícil acceso, como los espacios interdentales y debajo de la línea de las encías.

Escaladores

Los escaladores son instrumentos que emiten un chorro fino de agua para eliminar el sarro suelto y la placa. Suelen utilizarse como complemento de los raspadores manuales o ultrasónicos.

Proceso de Eliminación del Sarro

El proceso de eliminación del sarro suele comenzar con el uso del raspador ultrasónico para eliminar la mayor parte del sarro. A continuación, el dentista utiliza raspadores manuales o curetas para eliminar cualquier resto de sarro. Finalmente, se puede utilizar un escalador para eliminar cualquier placa o sarro suelto.

Beneficios de la Eliminación del Sarro

La eliminación del sarro es esencial para mantener una buena salud bucal. Previene las caries, la enfermedad de las encías y la pérdida de dientes. También mejora la apariencia de los dientes y el aliento.

Recomendaciones

Se recomienda acudir al dentista regularmente para que le limpien los dientes y le quiten el sarro. La frecuencia con la que necesita una limpieza dependerá de su riesgo individual de caries e enfermedad de las encías.