¿Qué ciudades quedan cerca de Alicante?

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A lo largo de la costa mediterránea, cerca de Alicante, se encuentran ciudades como Denia, Jávea, Calpe, Altea, Benidorm, Villajoyosa, Santa Pola, Guardamar y Torrevieja, cada una con su propio encanto y atractivos turísticos.
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Más allá de Alicante: Un recorrido por las joyas de la Costa Blanca

Alicante, con su vibrante cultura y sus playas de ensueño, es un imán turístico indiscutible. Sin embargo, la verdadera magia de la región reside en la riqueza de ciudades y pueblos que la rodean, cada uno ofreciendo una experiencia única a lo largo de la escarpada costa mediterránea. Abandonemos por un momento el bullicio de Alicante y exploremos las gemas ocultas de la Costa Blanca, un tesoro de paisajes diversos y encantos particulares.

Al norte de Alicante, nos encontramos con un rosario de localidades que se abrazan al mar. Denia, con su imponente castillo y su puerto pesquero, ofrece una mezcla de historia y tradición marinera. Su gastronomía, especialmente sus arroces, es un verdadero festín para el paladar. Un poco más al este, Jávea cautiva con sus calas recónditas y aguas cristalinas, un paraíso para los amantes del buceo y la tranquilidad. Su casco antiguo, con sus calles estrechas y casas blancas, respira autenticidad mediterránea.

Continuando hacia el norte, Calpe, con su emblemático Peñón de Ifach, se erige como un símbolo inconfundible del paisaje. Esta imponente roca caliza, que se alza majestuosa sobre el mar, ofrece vistas panorámicas impresionantes. La ciudad, con sus playas de arena fina y su ambiente cosmopolita, atrae a visitantes de todo el mundo. Más al norte aún, Altea, con sus casas blancas y cúpulas azules, evoca un encanto pintoresco y bohemio. Su casco antiguo, con sus callejuelas empedradas y su iglesia parroquial, es un lugar ideal para perderse y disfrutar del ambiente relajado.

Girando hacia el sur, descubrimos un panorama diferente. Benidorm, la ciudad de los rascacielos, destaca por su vibrante vida nocturna y sus playas de arena dorada. Un destino ideal para quienes buscan diversión y entretenimiento. Más al sur, Villajoyosa, con sus casas de colores que bordean el puerto, ofrece un espectáculo visual inigualable. Su tradición chocolatera es otro de sus grandes atractivos. Santa Pola, con su puerto deportivo y sus extensas playas, es perfecta para disfrutar de actividades acuáticas y de la tranquilidad del Mediterráneo.

Finalmente, llegando al extremo sur, encontramos Guardamar del Segura y Torrevieja. Guardamar, con sus dunas y sus extensas playas, es un oasis natural donde disfrutar del sol y la naturaleza. Torrevieja, famosa por sus lagunas saladas, ofrece un paisaje único y un microclima especial, convirtiéndose en un destino ideal para el turismo de salud.

Cada una de estas ciudades, situadas a corta distancia de Alicante, ofrece una experiencia única e inolvidable. Desde la tranquilidad de Jávea a la frenética vida nocturna de Benidorm, pasando por la historia de Denia y la belleza natural de Guardamar, la Costa Blanca ofrece un abanico de posibilidades para todos los gustos. Así que, si visita Alicante, no dude en explorar sus alrededores y descubrir las joyas que se esconden a pocos kilómetros de distancia. La aventura le espera.