¿Qué no hacer cuando te vas a tatuar?

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Evita rascarte o frotar el tatuaje; la actividad física intensa y la exposición solar directa son perjudiciales durante la cicatrización. Sigue al pie de la letra las instrucciones de tu tatuador para asegurar la correcta curación y la preservación del color y brillo del tatuaje.

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El Arte en Tu Piel: Lo que NO Debes Hacer Después de un Tatuaje

Un tatuaje es una decisión significativa, una obra de arte que llevas contigo de por vida. Pero la belleza del diseño recién impreso depende en gran medida de los cuidados posteriores. Mientras que el proceso de tatuaje en sí mismo es crucial, la etapa de cicatrización es igual de importante para garantizar que tu nueva tinta luzca vibrante y dure años. Por eso, es fundamental saber qué NO debes hacer para evitar arruinar tu inversión y, sobre todo, tu piel.

Olvida la idea romántica de un tatuaje recién hecho como un símbolo rebelde sin mantenimiento. La realidad es que requiere atención y cuidado, y saltarse las instrucciones puede resultar en un tatuaje descolorido, infectado o incluso con cicatrices indeseadas. Aquí te presentamos algunos errores comunes que debes evitar a toda costa:

1. El Toque Prohibido: Resistencia al Rascado y Fricción: La tentación es grande, especialmente en las primeras etapas de cicatrización cuando la piel puede picar o sentirse irritada. Sin embargo, rascarte o frotar el tatuaje es un grave error. Esto puede remover la capa superior de la piel, dañando la tinta y aumentando el riesgo de infección. La paciencia es clave; el picor es temporal y ceder a la urgencia de rascarte causará problemas a largo plazo.

2. Adiós al Sudor y al Sol: Actividad Física Intensa y Exposición Solar: Después de un tatuaje, tu piel está vulnerable. La actividad física intensa genera sudor, que puede obstruir los poros y atrapar bacterias, aumentando la posibilidad de infección. Del mismo modo, la exposición solar directa sin protección adecuada puede desvanecer los colores, dañar la piel y causar quemaduras, lo que inevitablemente afectará la apariencia y la longevidad de tu tatuaje. Opta por la ropa holgada y utiliza un protector solar de amplio espectro con un FPS alto si es inevitable la exposición al sol.

3. Desobedecer al Maestro: Instrucciones del Tatuador: Cada tatuador tiene su propio método y recomendaciones para el cuidado posterior. Seguir sus instrucciones al pie de la letra es fundamental. Esto incluye la frecuencia de limpieza, los productos a utilizar y el tiempo de curación. Si tienes alguna duda, no dudes en contactarlos; su experiencia es invaluable para asegurar que tu tatuaje cicatrice correctamente. Ignorar sus consejos puede tener consecuencias negativas que van desde una mala cicatrización hasta una infección grave.

4. Baños Prolongados y Productos Agresivos: Los baños prolongados en agua caliente pueden irritar la piel sensible y recién tatuada. Del mismo modo, el uso de jabones perfumados, cremas con alcohol o productos agresivos puede interferir con el proceso de cicatrización y resecar la piel. Opta por duchas cortas con agua tibia y productos suaves e hipoalergénicos recomendados por tu tatuador.

En resumen, el cuidado post-tatuaje es una inversión en la belleza y la durabilidad de tu nuevo arte corporal. Evitar estos errores comunes te ayudará a disfrutar de tu tatuaje vibrante y saludable por muchos años. Recuerda, la paciencia y el seguimiento cuidadoso de las instrucciones de tu tatuador son la clave para un resultado exitoso.