¿Cuándo empieza a ser el día más corto?

El Regreso de la Luz: El Solsticio de Invierno y el Fin de los Días Más Cortos

Este sábado 21 de diciembre de 2024, el sol alcanzará su punto más bajo en el cielo del hemisferio norte, marcando el solsticio de invierno. Para muchos, este día representa más que una fecha en el calendario; simboliza el punto álgido del invierno, el día más corto del año, y, paradójicamente, el renacimiento de la luz.

Durante meses, hemos sido testigos de una gradual disminución de las horas de luz solar. Cada atardecer se ha adelantado, cada amanecer se ha retrasado, acortando nuestros días y alargando nuestras noches. Esta lenta declinación, imperceptible al principio, ha culminado en este día, en el que el sol permanece visible durante el menor tiempo posible.

Pero el solsticio de invierno no es un punto final, sino un punto de inflexión. A partir de este momento, la dinámica comienza a revertirse. Aunque la sensación térmica nos recuerde la persistencia del frío, el día más corto del año también marca el inicio de una progresiva, aunque sutil al comienzo, recuperación de las horas de luz.

La magia del solsticio radica en esta promesa implícita: la luz regresa. Después de alcanzar su mínimo, el sol comienza su ascenso gradual, un símbolo de esperanza y renovación que ha sido celebrado a lo largo de la historia por numerosas culturas. Desde antiguos rituales paganos hasta las festividades navideñas, el solsticio de invierno ha sido una fuente constante de inspiración, representando la promesa de la primavera y el renacimiento de la vida después del largo y oscuro invierno.

No es solo la duración del día lo que cambia, sino también la posición del sol en el cielo. Desde este día, su trayectoria comenzará a elevarse, un cambio gradual que, con el paso de las semanas, se hará cada vez más evidente, dando paso a días más largos y, eventualmente, a la llegada de la primavera.

Así que, mientras celebramos el día más corto del año, recordemos que este es también un día de esperanza. Un día en el que el sol, en su viaje eterno, comienza su camino de regreso, trayendo consigo la promesa de días más soleados y la anticipación de la llegada de la primavera. El solsticio de invierno: un recordatorio de que incluso en la oscuridad más profunda, la luz siempre regresa.