¿Dónde es más utilizada la corriente continua?

¿Dónde se utiliza más la corriente continua (CC)?

La corriente continua (CC) desempeña un papel fundamental en diversos dispositivos y sistemas. Su uso se extiende desde aplicaciones cotidianas hasta industrias especializadas. A continuación, se destacan algunos de los ámbitos donde la CC es más utilizada:

Baterías de vehículos eléctricos:

Los vehículos eléctricos funcionan con baterías de CC. Estas baterías proporcionan la energía necesaria para alimentar el motor eléctrico, que impulsa el vehículo. La CC se utiliza tanto en baterías de iones de litio como de plomo-ácido, que son los tipos más comunes de baterías utilizadas en los vehículos eléctricos.

Dispositivos portátiles con batería:

La mayoría de los dispositivos portátiles, como teléfonos inteligentes, computadoras portátiles y tabletas, utilizan baterías de CC. Estas baterías permiten que los dispositivos funcionen sin estar conectados a una fuente de alimentación externa. La CC proporciona una fuente de energía constante y confiable para estos dispositivos.

Carga de ordenadores:

Los ordenadores de sobremesa y portátiles utilizan adaptadores de corriente alterna (CA) a CC para convertir la CA de la red eléctrica en CC para alimentar el equipo. Esto es necesario porque los componentes internos del ordenador, como la placa base y el procesador, requieren CC para funcionar correctamente.

Aplicaciones industriales:

La CC también se utiliza en varias aplicaciones industriales, como:

• Electroquímica: La CC se utiliza en procesos electroquímicos, como la electrólisis y el galvanizado, donde se controla el flujo de iones en una solución.
• Control de motores: Los motores de CC se utilizan en una amplia gama de aplicaciones, desde robótica hasta sistemas de transporte. La CC proporciona un control preciso de la velocidad y el par del motor.
• Fuentes de alimentación ininterrumpida (UPS): Las UPS proporcionan energía de respaldo de CC a equipos críticos en caso de un corte de energía. Esto asegura que los servidores, los sistemas de telecomunicaciones y otros equipos esenciales continúen funcionando sin interrupción.

En resumen, la corriente continua (CC) es esencial para alimentar una amplia gama de dispositivos y sistemas, desde vehículos eléctricos y dispositivos portátiles hasta aplicaciones industriales. Su uso está muy extendido debido a su capacidad para proporcionar energía constante y confiable, así como su fácil control y conversión.