¿Cuánto tiempo puede estar una tortilla?

El tiempo de vida de una tortilla: Un asunto de seguridad alimentaria

La tortilla, un elemento fundamental en la gastronomía mexicana y presente en innumerables platillos alrededor del mundo, es un alimento delicado en términos de conservación. Su composición, rica en humedad y nutrientes, la convierte en un caldo de cultivo ideal para bacterias si no se maneja con las precauciones adecuadas. Entonces, ¿cuánto tiempo puede realmente estar una tortilla antes de volverse un riesgo para la salud?

La respuesta, como en muchos casos relacionados con la seguridad alimentaria, no es absoluta. Depende crucialmente de la temperatura a la que se almacene. Si hablamos de tortillas refrigeradas, la recomendación es clara: deben consumirse dentro de las 24 horas posteriores a su elaboración. Mantenerlas a una temperatura baja (8°C o menos) ralentiza el crecimiento bacteriano, pero no lo detiene por completo. Pasado este tiempo, el riesgo de intoxicación alimentaria aumenta significativamente, incluso si la tortilla aparenta estar en buen estado.

Por otro lado, si las tortillas se mantienen calientes, a una temperatura de 63°C o superior, teóricamente pueden durar más tiempo sin representar un peligro inmediato. Esta temperatura inhibe la proliferación de la mayoría de las bacterias patógenas. Sin embargo, la calidad de la tortilla se verá afectada con el paso del tiempo. Se volverán secas, rígidas y perderán su sabor y textura característicos. Por lo tanto, aunque seguras desde el punto de vista microbiológico, su palatabilidad disminuirá considerablemente.

Es importante destacar que estas recomendaciones se aplican a tortillas ya elaboradas. La masa cruda para tortillas tiene una vida útil diferente y requiere otras consideraciones de almacenamiento.

En resumen, para disfrutar de unas tortillas deliciosas y seguras, la clave es la refrigeración adecuada y el consumo dentro de las 24 horas. Mantenerlas calientes puede ser una opción temporal para eventos o servicios de comida, pero la calidad se verá comprometida a largo plazo. Priorizar la seguridad alimentaria es esencial para evitar experiencias desagradables e incluso peligrosas. No arriesgue su salud por una tortilla pasada de tiempo.