¿Qué debo tomar para no tener la boca amarga?

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Para evitar la boca amarga, cepíllate los dientes y la lengua a diario. Enjuaga con un colutorio, bebe líquidos, mastica chicle sin azúcar o come caramelos ácidos. Si el sabor persiste, usa cubiertos de plástico.
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¿Qué tomar para eliminar la boca amarga?

La boca amarga es una afección común que puede tener varias causas, desde la higiene bucal deficiente hasta problemas más graves de salud. Si bien no existe una cura única para la boca amarga, hay varios pasos que puedes tomar para aliviar este molesto síntoma.

Medidas preventivas diarias:

  • Cepíllate los dientes y la lengua dos veces al día: Eliminar la placa y las bacterias que se acumulan en los dientes y la lengua puede ayudar a prevenir la boca amarga.
  • Enjuaga con un colutorio antibacteriano: Los colutorios que contienen clorhexidina o peróxido de hidrógeno pueden matar las bacterias que causan el mal aliento y la boca amarga.
  • Mantente hidratado: Beber mucha agua ayuda a eliminar las bacterias y los restos de alimentos de la boca, reduciendo así el riesgo de boca amarga.

Medidas para aliviar la boca amarga:

  • Mastica chicle sin azúcar: Masticar chicle sin azúcar estimula la producción de saliva, que ayuda a neutralizar los ácidos de la boca y a eliminar las bacterias.
  • Come caramelos ácidos: Los caramelos ácidos pueden estimular la producción de saliva, lo que ayuda a eliminar el sabor amargo. Sin embargo, es importante moderar su consumo para evitar dañar los dientes.
  • Usa cubiertos de plástico: Si sospechas que los cubiertos de metal están contribuyendo a tu boca amarga, cámbialos a cubiertos de plástico. Esto puede ayudar a reducir el contacto con el metal, que puede provocar una reacción química que produce un sabor amargo.

Otras consideraciones:

  • Evita el tabaco y el alcohol: El tabaco y el alcohol pueden irritar la boca y aumentar el riesgo de boca amarga.
  • Trata las causas subyacentes: Si la boca amarga persiste a pesar de seguir estas medidas, consulta a un médico o dentista para descartar cualquier problema de salud subyacente, como reflujo ácido o enfermedad hepática.

Recordar que la boca amarga puede ser un síntoma de una afección de salud más grave. Si el sabor amargo persiste o está acompañado de otros síntomas, como dolor o inflamación, es esencial buscar atención médica de inmediato.