¿Qué hidrata más, agua natural o con gas?

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Investigaciones de 2016 indican que el agua con gas hidrata de manera similar al agua sin gas y otras bebidas habituales, descartando la creencia popular de una diferencia significativa en su capacidad hidratante. La hidratación depende más del volumen ingerido que del tipo de agua.

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Agua con gas vs. agua natural: ¿Cuál hidrata mejor? Desmintiendo un mito.

La eterna pregunta: ¿el agua con gas deshidrata o hidrata igual que el agua natural? Durante años, ha circulado la creencia popular de que el gas presente en el agua con gas interfiere con la absorción de líquidos por el organismo, llevando a una menor hidratación. Sin embargo, la evidencia científica actual refuta esta afirmación.

Investigaciones realizadas en 2016, y corroboradas por estudios posteriores, indican que no existe una diferencia significativa en la capacidad hidratante entre el agua con gas y el agua sin gas. Ambos tipos de agua, así como otras bebidas comunes como los zumos (sin azúcar añadido) o las infusiones, contribuyen a la hidratación de forma similar.

El factor determinante en la reposición de líquidos en el cuerpo no reside en el tipo de agua que se consume, sino en la cantidad ingerida. Beber un litro de agua con gas hidratará al cuerpo de forma tan efectiva como beber un litro de agua sin gas. La sensación de distensión abdominal que a veces se asocia con el consumo de agua con gas es una cuestión de sensibilidad individual, pero no implica una menor hidratación.

Por lo tanto, la decisión de optar por agua con gas o sin gas se basa principalmente en preferencias personales. Si disfruta del sabor burbujeante y la sensación refrescante del agua con gas, no dude en incluirla en su ingesta diaria de líquidos. Lo importante es asegurar una hidratación adecuada a través del consumo suficiente de líquidos, independientemente de si son con o sin gas.

Es crucial recordar que la hidratación óptima varía según factores como el clima, la actividad física y la salud individual. Escuchar las señales de su cuerpo, como la sed, la orina de color claro y la ausencia de fatiga, es crucial para determinar si está consumiendo la cantidad suficiente de líquido.

En resumen, olvidemos el mito. Tanto el agua con gas como el agua sin gas hidratan de forma eficaz. Priorice el volumen de líquido ingerido y escuche a su cuerpo para mantener una hidratación adecuada y un óptimo estado de salud.