¿Cómo se llama cuando truena el estómago?

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Los ruidos estomacales, conocidos técnicamente como borborigmos, son causados por la contracción rítmica y continua del tracto digestivo, moviendo el alimento y los gases a través del sistema. Estos sonidos son completamente normales.

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El Misterio Detrás del Rugido Interior: ¿Cómo Llamamos al Trueno Estomacal?

Todos lo hemos experimentado: ese sonido gutural, a veces discreto, a veces atronador, que emerge de nuestras entrañas, especialmente en momentos inoportunos. Pero, ¿cómo llamamos a ese fenómeno tan común como embarazoso? Aunque popularmente se diga que “truena el estómago”, la ciencia le otorga un nombre más técnico y descriptivo: borborigmos.

Los borborigmos, a pesar de su reputación a veces negativa, son una señal inequívoca de que nuestro sistema digestivo está funcionando. Contrario a la creencia popular de que solo ocurren cuando tenemos hambre, los borborigmos son el resultado de la contracción rítmica y continua del tracto digestivo. Imaginen una orquesta intrincada, donde cada instrumento (el estómago, el intestino delgado, el intestino grueso) contribuye a la melodía del proceso digestivo.

Esta orquesta se encarga de mover los alimentos, líquidos y gases a lo largo de todo el sistema, desde que entran por nuestra boca hasta que son finalmente expulsados. Las contracciones musculares, conocidas como peristaltismo, son las responsables de este movimiento. A medida que los alimentos y los gases se desplazan a través de un tubo hueco como es el intestino, producen vibraciones y, por ende, los ruidos que percibimos como borborigmos.

Es importante recalcar que estos sonidos son completamente normales. De hecho, la ausencia total de ruidos intestinales podría ser motivo de preocupación y señalar un problema médico subyacente, como una obstrucción intestinal.

En resumen, la próxima vez que escuches el “trueno” en tu estómago, recuerda que estás escuchando la sinfonía de la digestión en acción. Si bien “truena el estómago” es una expresión coloquial aceptable, el término técnico para este fenómeno natural y vital es borborigmos. Así que, la próxima vez que te pregunten, ¡ya tienes la respuesta!