¿Cómo se dice cuando dos tienen el mismo nombre?

Más allá del nombre: Tocayos y la coincidencia de identidades

Cuando dos personas comparten el mismo nombre, la forma más común y natural de referirse a ellas es diciendo que son tocayos. Esta palabra, de origen incierto, pero arraigada en el idioma español, captura la esencia de la coincidencia en el nombre propio. Implica una conexión, aunque sea superficial, basada en la identidad de denominación.

Si bien la palabra homónimos también podría parecer una opción, es fundamental comprender su significado. Mientras que “tocayos” se refiere a personas con el mismo nombre, “homónimos” se aplica a palabras que, a pesar de ser escritas o pronunciadas de la misma forma, tienen significados diferentes. Por ejemplo, “banco” (de peces) y “banco” (de dinero) son homónimos. Esta distinción es crucial para evitar confusiones. El uso de “homónimos” para referirse a personas con el mismo nombre sería impropio y conflictivo.

En resumen, tocayos es la designación correcta y precisa cuando nos referimos a dos personas que comparten el mismo nombre. Nos remite a una identidad compartida en la denominación, un punto de contacto en el mar de individualidades. Usar “homónimos” en este contexto genera un malentendido sobre el concepto y la categoría gramatical que se pretende describir.