¿Qué color se usa en el mes de septiembre?

16 ver
Septiembre marca un nuevo comienzo, un momento para renovar nuestro hogar y armonizarlo con la transformación de la naturaleza. **El verde oliva, inspirado en la madurez de las aceitunas, se erige como el color protagonista de este otoño, aportando un toque de serenidad y calidez a nuestro interior.**
Comentarios 0 gustos

Septiembre: Renueva tu hogar con la serenidad del verde oliva

Septiembre llega susurrando cambio. Las hojas inician su danza cromática hacia tonos ocres y dorados, el aire se vuelve fresco y una sensación de renovación impregna el ambiente. Es el momento perfecto para reflejar esta transformación en nuestro hogar, creando un espacio que nos invite a la calma y la introspección. Este año, olvidémonos de los naranjas vibrantes o los rojos intensos tradicionalmente asociados al otoño. En su lugar, demos la bienvenida a un tono sofisticado y terroso que captura la esencia misma de la temporada: el verde oliva.

Inspirado en la madurez de las aceitunas, justo antes de la cosecha, este verde apagado y ligeramente grisáceo aporta una serenidad única a cualquier espacio. A diferencia de otros verdes más vibrantes, el verde oliva posee una calidez inherente que lo convierte en el aliado perfecto para crear ambientes acogedores y reconfortantes. Imaginemos un salón bañado por la luz tenue del atardecer, con paredes pintadas en este tono suave y amueblado con piezas de madera natural y textiles en tonos crudos. La atmósfera que se crea es de pura paz y armonía.

La versatilidad del verde oliva es otra de sus grandes virtudes. Combina a la perfección con una amplia gama de colores, desde los neutros como el beige, el gris o el blanco roto, hasta tonos más terrosos como el marrón chocolate o el terracota. Para un toque de contraste y luminosidad, podemos incorporarlo junto a detalles en dorado envejecido o latón, creando un ambiente elegante y sofisticado.

No es necesario pintar todas las paredes para disfrutar de la magia del verde oliva. Podemos introducirlo a través de textiles como cojines, mantas o cortinas, o en piezas de mobiliario como un sofá o una butaca. Incluso pequeños detalles decorativos, como jarrones, cuadros o velas en este tono, pueden marcar la diferencia y aportar ese toque de serenidad otoñal que buscamos.

Este septiembre, invitemos al verde oliva a nuestro hogar y dejemos que su tranquila elegancia nos envuelva. Renovemos nuestro espacio, conectando con la naturaleza y creando un refugio de paz y armonía para disfrutar de la llegada del otoño. Un cambio sutil, pero con un impacto profundo en nuestro bienestar.